- El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, aseguró que “en la nueva FIFA el dinero ya no desaparece y va donde tiene que ir, a ayudar al fútbol” en la situación de pandemia actual, en la que “el próximo desafío es que los aficionados vuelvan a llenar los estadios”.

Durante su intervención en la apertura del 70 Congreso que la FIFA celebró ayer de manera telemática, Infantino destacó las medidas adoptadas por la organización para ayudar económicamente a las asociaciones nacionales y con una dotación de 1.500 millones de dólares.

Además, el Congreso de la FIFA aprobó la modificación del reglamento sobre el cambio de federación de los jugadores con posibilidad de representar a más de un país y así evitar que las federaciones bloqueen a jóvenes promesas por haber participado en un partido oficial con la selección absoluta que primero le convoque. Ese fue el caso de Munir el Haddadi, ahora en el Sevilla. En 2014 l entonces seleccionador español Vicente Del Bosque le hizo debutar 13 minutos en un encuentro de la fase de clasificación de la Eurocopa 2014 ante Macedonia (5-1) y por eso ya no pudo disputar el Mundial 2018 con Marruecos, el país de sus padres. Entonces Munir estaba en el Barça, y otro exazulgrana, Bojan Krkic, de padre serbio, también sufrió el mismo problema tras disputar, en 2008, 25 minutos de un partido de clasificación para el Mundial 2010 ante Armenia (4-0).

Infantino denunció que “la FIFA era un lugar tóxico” hace cinco años, antes de que él llegara a la presidencia en 2016, y defendió que su reunión con el fiscal general de Suiza, por la que se abrió una investigación reciente en el país, “era una obligación porque”, dijo, “quería liberar a la FIFA de las sombras del pasado