- "No habrá una revolución, pero hay que tomar decisiones", describió ayer Ronald Koeman en su primera comparecencia pública como entrenador del Barcelona. El neerlandés lo dijo en inglés, respondiendo a un medio de comunicación anglosajón, resucitando su paso por el fútbol británico durante tres campañas en los banquillos de Southampton y Everton. En resumen: habrá cambios, eso seguro. Para empezar, Ramón Planes tomará las riendas de la secretaría técnica culé después de la salida de Eric Abidal. Asimismo, de la mano del entrenador de Zaandam aterrizan en el staff el exbarcelonista Henrik Larsson (tercer entrenador) y Alfred Schreuder (segundo). "Me dolió ver al Barça contra el Bayern. Fue un día triste, no te voy a engañar", explicó sobre el terremoto que le ha llevado hasta el Camp Nou.
No obstante, el escozor del 2-8 recibido el pasado viernes en los cuartos de final de la Liga de Campeones, una masacre teutona, no supondrá un acicate para seccionar la columna vertebral del equipo. "Un jugador con 32 años no está acabado. Todo es el hambre que tenga, las ganas que tenga de darlo todo. Hay gente con 20 años a la que le falta hambre y trabajo. Solo quiero trabajar con gente que quiera estar aquí. Al que no le guste que vaya al club y se lo diga. Solo quiero trabajar con gente que quiera dar el máximo por el Barcelona", declaró el expreparador de la selección de Países Bajos, quien afirmó que "lo que tenemos que hacer a partir de hoy es buscar lo mejor para el club. Buscar la plantilla más fuerte posible. Ya sé que hay jugadores con cierta edad que podéis tener dudas sobre su rendimiento. Hay que respetarlos. Nosotros buscaremos lo mejor para el club. Si hay que tomar decisiones, las vamos a tomar. A partir de hoy, vamos a trabajar. Desde el último fin de semana estamos hablando de las decisiones y los nombres, pero no los voy a decir por respeto". Asimismo, agregó el nuevo míster azulgrana que "a partir de ahora vamos a trabajar, a entrenar fuerte al equipo. Hay que hacer cambios. La imagen del otro día -el 2-8 ante el Bayern- no es lo que queremos ni yo ni nadie. Tenemos que trabajar mucho para recuperar el prestigio. Seguimos siendo el club más grande del mundo. Ahora, a trabajar para poner al Barça donde tiene que estar: arriba del todo".
El meollo de la rueda de prensa, sin embargo, orbitó en buena medida alrededor de un nombre: Leo Messi. "No sé si tengo que convencerlo. Claro que quiero tenerlo en el equipo. Me encantaría trabajar con él porque te gana partidos. Si saca el rendimiento de siempre, estaré contentísimo de que se quede. Tiene contrato. Hay que hablar con él, claro, que es el capitán del equipo. Tenemos que hablar con varios jugadores. Tenemos que tomar decisiones. En el caso de Messi, ojalá siga más años aquí", manifestó Koeman, que tiene previsto convencer al astro argentino en una reunión. Del resto de la plantilla, aunque fue cuestionado por jugadores como Luis Suárez o posibles fichajes, prefirió no contestar. Eso sí, sobre Philippe Coutinho, cedido en el Bayern después de dos campañas de nubarrones como culé, el neerlandés declaró que "es jugador del Barcelona y si hay que tomar decisiones, las tomaremos. Sé que tengo más tiempo para conocer a los jóvenes que hay. Veo todo muy positivamente. Es un momento para dar posibilidades a los jóvenes cuando se lo merecen. Los holandeses no tenemos dudas a la hora de poner jóvenes cuando se lo merecen. Pero no solo jóvenes. Hay que tener equilibrio". Aviso a navegantes.
Si bien es cierto que tiene firmados dos campañas en el banquillo del Camp Nou, Koeman se enfrenta a un año decisivo, pues el presidente Josep Maria Bartomeu fija las elecciones en junio de 2021. "Lo único que puedo hacer es sacar resultados con el Barcelona. Sé que hay elecciones, pero yo puedo hacer lo que puedo hacer. Debo hacer mi trabajo. Si gano, el próximo presidente puede tener más dudas y ojalá que siga conmigo", remachó Koeman.
"Solo quiero trabajar con el que quiera estar aquí; al que no le guste, que vaya al club y se lo diga"
Entrenador del FC Barcelona
