VALENCIA - El Valencia Basket anunció ayer que acata la decisión de la Conselleria de Sanitat Universal i Salud Pública de que debe jugar a puerta cerrada su partido de esta noche de la Euroliga ante el Armani Milan como medida de prevención ante la expansión del coronavirus, pese a que subrayó que no les gusta la decisión. “La cumplimos, aunque no nos guste”, señaló la entidad en un comunicado en el que explica las propuestas que ha realizado para que no fuera así. El Valencia recordó que le consta que no iba a haber aficionados italianos que llegaran de zonas de riesgo, ya que las 74 entradas que ha vendido han sido “a público local”.
También señaló que ha ofrecido la posibilidad de anular dichas localidades y que había requerido a los periodistas italianos para que no se desplazaran y se había ofrecido a enviar telemáticamente toda la información. “Con las medidas citadas, el encuentro cumpliría con los requisitos para poder disputarse con público y bajo total y absoluta normalidad, que entendemos que es el objetivo que se pretendía y no el de generar una sensación preocupante en este caso concreto”, reconoció disgustado el club taronja.