madrid-sofía - La UEFA confirmó ayer la apertura de un procedimiento disciplinario tras el Bulgaria-Inglaterra jugado en Sofía (0-6), interrumpido dos veces por actitud racista de aficionados búlgaros, e investigará el gesto de los jugadores turcos en los encuentros ante Francia y Albania.

La UEFA responsabiliza a la federación búlgara de incumplir su normativa disciplinaria y de seguridad por comportamiento racista, lanzamiento de objetos, interrupción del himno nacional y repeticiones en pantallas gigantes. Al respecto, el presidente de la Unión Búlgara de Fútbol, Borislav Mihaylov, que había negado su intención de dimitir, anunció que lo hará tras la presión del Gobierno búlgaro.

La UEFA también investigará el comportamiento provocador de los jugadores de la selección de Turquía ante Francia el lunes y el pasado día 11 frente a Albania. Los jugadores turcos repitieron en París el polémico saludo militar, después de que Kaan Ayhan lograra el gol del empate contra Francia (1-1). El gesto es interpretado como un apoyo a los ataques de su país contra posiciones kurdas en Siria, condenados por gran parte de la comunidad internacional. - DNA/Efe