COREA DEL SUR Jo; Lee Y., Kim, Yun, Hong; Lee J., Jung, Jang, Moon (Ju, min.69); Koo (Hwang, min.56; Go, min.79) y Son.
ALEMANIA Neuer; Kimmich, Hummels, Sule, Hector (Brandt, min.78); Khedira (Gomez, min.58), Kroos; Goretzka (Muller, min.63), Ozil, Reus; y Werner.
Goles 1-0, min.93: Kim. 2-0, min.96: Son.
Árbitro Mark Geiger (USA). Amonestó a Yung, Lee J., Moon y Son por parte de Corea del Sur.
Estadio Kazán Arena, ante 41.835 espectadores.
Kazan - La selección alemana protagonizó la gran sorpresa del Mundial de Rusia tras perder con Corea del Sur (2-0) y quedar eliminada en la fase de grupos, algo que no le ocurría desde hace 80 años y que provocará que el fútbol tenga nuevo rey el próximo 15 de julio.
La vigente campeona quedó eliminada a las primeras de cambio en octavos de final del Mundial de Francia 1938, cuando ni siquiera existía la fase de grupos, y nunca había vuelto a encajar un golpe tan duro. Ni siquiera Brasil podía presumir de algo así, ya que la pentacampeona cayó en la fase de grupos de Inglaterra 1966. No presagiaba el desastre el pasado antiguo ni tampoco el más reciente, ya que Alemania llevaba cuatro Mundiales seguidos alcanzando al menos las semifinales, con título incluido hace cuatro años.
El torneo donde sufren las favoritas, ese al que ni siquiera llegó Italia, en el que Brasil, España o Argentina están sudando sangre para puntuar contra selecciones que tradicionalmente apenas le hubiera costado superar, se cobró su víctima más ilustre, nada menos que la ‘Mannschaft’, tetracampeona mundial.
Tras la derrota inicial ante México (1-0) y sobrevivir ante Suecia gracias a una genialidad ‘in extremis’ de Toni Kroos (2-1), el castillo alemán se derrumbó definitivamente ante el rival teóricamente más inferior del grupo, una Corea que redondeó la humillación condenando a su adversario al último puesto de este Grupo F.
Las noticias que llegaban desde el Ekaterimburgo Arena, donde Suecia goleaba a México, obligaban a los pupilos de Joachim Löw a marcar un tanto, tan solo uno, ante un rival que estaba ya eliminado porque su única opción de seguir aspirando a los octavos pasaba por un triunfo azteca.
Pero el gol no llegó. Del minuto 80 al 90 la tuvieron Reus, con un disparo lejano, luego Hummels, que falló la más clara de cabeza en boca de gol, y acto seguido Kroos, cuyo tiro raso fue atajado por el imperial Jo. El portero coreano, nombrado mejor jugador del encuentro, ya había dejado una parada espectacular ante Goretzka nada más iniciarse la segunda parte, después de una primera mitad en la que Alemania mostró el mismo nervio que en un partido amistoso, algo que acabó saliendo tan caro como podía concebir en su peor pesadilla.
Corea, que no se descompuso en ningún momento y que también tuvo sus propias ocasiones por medio de Son, un tormento solo aliviado por la inteligencia de Hummels, aprovechó que su adversario estaba completamente volcado para dar la puntilla con dos goles en el descuento.
El primero tuvo que surgir del VAR, que confirmó que Kim no estaba en fuera de juego antes de fusilar a Neuer porque el pase involuntario venía de un jugador alemán, y en el segundo, el que regó de lágrimas germanas las gradas del Kazán Arena, fue obra de Son. El extremo del Tottenham marcó a puerta vacía, tras recoger un pelotazo cuando Neuer ya circulaba por el área coreana buscando la épica.
Tras dos derrotas encontraba premio el ardor guerrero de Corea, la selección que más faltas ha cometido en el Mundial, y encontraba la hecatombe Alemania, descabalgada antes de tiempo y víctima de la mayor decepción de su historia, esa que desmiente a Gary Lineker, autor de uno de los aforismos más famosos en la historia. Al contrario de lo que pregonó en su momento el exdelantero inglés, al fútbol no siempre gana Alemania. - E.P.