Vitoria - Javi Domínguez (Gasteiz, 1974) consiguió ayer la victoria más gigantesca de su exitosa trayectoria deportiva. En su primera participación en el Tor des Géants, una descomunal carrera de montaña de 330 kilómetros y 24.000 metros de desnivel, el vitoriano ganó y estableció un nuevo récord al completar la prueba en 67 horas, 52 minutos y 15 segundos, dos horas menos que la marca que poseía el guipuzcoano Iker Karrera desde 2013 (70:04:15). Domínguez, que nunca se había enfrentado a una distancia semejante (es el equivalente a ir desde Vitoria a Huesca, con el añadido de que se atraviesan 25 cimas de más de 2.000 metros), protagonizó en el último tramo de la prueba una espectacular remontada que le catapultó hasta la meta de Courmayeur (Italia), que cruzó ayer a las 6.12 horas. El corredor del equipo Vibram y de la euskal selekzioa partió el domingo a las 10.20 horas desde Courmayeur en el pelotón de 867 corredores (561 hombres y 77 mujeres) que afrontaron el considerado como ultratrail más duro del mundo. Por delante tenían un trazado durísimo por el valle de Aosta y 150 horas de máximo (se espera que el último corredor llegue a meta este próximo sábado) para completar las dos millas del recorrido. Un trazado circular que debe su nombre a las cuatro grandes cumbres de los Alpes que rodea: Mont Blanc, Cervino, Monte Rosa y Gran Paradiso. Durante las primeras 24 horas y hasta bien avanzado el lunes, Domínguez alternó el primer puesto con Franco Collé (ganador en 2014), que definitivamente tomó la cabeza el martes. El italiano llegó a contar ese día con hasta tres horas de ventaja sobre Domínguez, que nunca bajó del segundo puesto, pero al caer la noche la carrera sufrió un vuelco. Cerca de la medianoche y a apenas 22 kilómetros de la meta, el vitoriano superó a Collé, que sufrió un pajarón (tardó 7 horas en cubrir 21 kilómetros). El gasteiztarra enfiló hacia la llegada de Courmayeur, donde se impuso con suficiencia: el segundo clasificado, el italiano Oliviero Bosatelli, llegó hora y media después (69:16), y el tercero, el también italiano Andrea Macchi, tardó seis horas más (74:51). Collé, desfallecido, se retiró.

el sueño, una pesadilla En una carrera del calibre del Tor des Géants, tan importante como el derroche físico y mental, es gestionar bien el reposo. Los corredores disponen de 43 avituallamientos y siete bases de vida, zonas de descanso en las que se hidratan, comen e incluso duermen microsiestas que no llegan a una hora. El sueño era precisamente el principal temor de Domínguez, que nunca había corrido una carrera que se prolongara tres noches, si bien atesora una larga experiencia en ultratrails. La buena gestión de los descansos (en los que contaba con un grupo de apoyo) fue clave en su triunfo.

Pese a ser un corredor menos mediático que figuras como Kilian Jornet o Iker Karrera, el gasteiztarra atesora hasta la fecha un extraordinario palmarés (ha ganado cuatro veces la Ehunmilak de Beasain, es el actual campeón estatal de ultratrail tras vencer este año en la Travesera Integral de Picos de Europa y cuenta también con un triunfo en la Hiru Haundiak), y está cuajando una temporada sobresaliente. El Tor des Géants era su principal objetivo del año y lo había preparado a conciencia, incluso reconociendo previamente el trazado en una marcha a pie este verano. El debut de este profesional de la Física (trabaja como físico en el centro tecnólogico Ideko-IK4 de Elgoibar) que desafía las leyes del físico ha sido a lo grande. Triunfo y récord, a razón de casi 120 kilómetros diarios.