Vitoria - El fútbol alavés volverá a contar este curso con tres representantes del territorio en la Tercera División. No obstante, el escenario ha cambiado sustancialmente al de la campaña pasada, con algunas viejas caras y otras nuevas. Lo que seguro volverá a repetirse es tanto la diversidad de objetivos como la emoción, que tuvo al Vitoria, ahora en Segunda B, como el protagonista que finaliza su historia en final feliz y al Alavés B formando parte de la versión amarga del cuento. El filial albiazul se quedó a las puertas del ascenso en la eliminatoria contra el Ontinyent, que finalizó en la tanda de penaltis.

Los de Aitor Orueta volverán a fijar su mirilla en la categoría de bronce, que intentarán alcanzar a toda costa. Para empezar, hoy se medirán al Getxo a domicilio a las 18.00 horas.

El Alavés B querrá superar el doloroso trago que sufrió hace apenas dos meses con la frustración de su ascenso y convertirlo en su motivación para dar el salto definitivamente el próximo curso. Para hacerlo se presenta como uno de los grandes favoritos -si no el que más, con permiso de clubes como el Zamudio- del Grupo IV, a pesar de haber recibido numerosos cambios en la plantilla. Fichajes destacados como Alexandre Roselli o Azzan unidos a caras conocidas como la de Dani Iglesias garantizarán al miniglorias su permanencia en los primeros puestos de la categoría.

Consolidación Más modestos serán a priori los objetivos del Amurrio. Los del Valle de Ayala volverán a contar este curso con uno de los presupuestos más reducidos de la competición. Una circunstancia con la que ya están acostumbrados a lidiar. Pese a sus limitaciones, los alaveses consiguieron salvar la categoría la campaña pasada tras su ascenso en 2016 con un tranquilo duodécimo puesto. Confían en asentarse de cara a este curso, siempre pensando en la permanencia. Hoy inauguran el Grupo IV en casa ante el Beasain, a las 16.00 horas.

Como curiosidad, la entidad ayalesa rompió su convenio con el Athletic de 25 años y ha firmado uno nuevo con el Alavés, a pesar de ser rivales en la categoría. El propio filial albiazul ya ha prestado al Amurrio alguna de las ocho incorporaciones que han realizado a lo largo del verano. A pesar de ello, en Basarte siguen confiando en la firmeza del bloque y han apostado por la continuidad del núcleo que rindió de manera óptima en la pasada temporada, con una plantilla formada por ocho vitorianos y, a falta de algún imprevisto, ya cerrada de cara al inicio de liga.

Al frente del cuadro ayalés seguirá un año más el técnico Javi Pereda. El de Laudio cumplirá así su tercer año en el Amurrio, equipo con el que debutó en la Preferente.

Permanencia Precisamente, el tercer equipo alavés que jugará este año en Tercera viene de dicha competición. El Aurrera se enfrenta a un nuevo reto deportivo tras su reciente ascenso desde la Preferente, donde solo el Ariznabarra pudo hacer frente al potente equipo rojillo. Los de Olaranbe, que este curso tendrán que compartir campo con el Vitoria, regresan a la competición que perdieron en 2016. Lo hacen con varias caras nuevas, empezando por el técnico. La directiva rojilla ha dado el mando del primer equipo a Roberto Martínez, técnico debutante en Tercera División que viene de entrenar en las categorías inferiores del Deportivo Alavés. No sigue por lo tanto Cándido Arroyo, preparador con el que consiguieron ascender la pasada campaña. Al igual que el Amurrio, el Aurrera apostará mayormente por la plantilla que barrió la Preferente en la 2016-17, aunque añade experiencia a la fórmula con incorporaciones como la del veterano Tyson. Todo ello, claro está, para lograr la ansiada permanencia y recuperar la estabilidad de la que gozó en épocas pasadas en dicha categoría. Los rojillos se estrenan en Balmaseda a las 18.00