Madrid - La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) anunció ayer, a través de un escueto comunicado de prensa que publicó en su página de Internet, el aplazamiento de los actos que tenía previstos para hoy, mañana y el viernes. “Las reuniones de los órganos señaladas para los días 19, 20 y 21 de julio de 2017 quedan aplazadas hasta nueva fecha”, rezaba el escrito. Pese a que el texto no hacía mención expresa al sorteo de los calendarios de las competiciones de Primera, Segunda y Segunda B, previsto para mañana, estos también se retrasarán, previsiblemente hasta el martes o el miércoles de la próxima semana, aunque este extremo todavía está por confirmarse. De esta forma, los equipos de fútbol -y sus aficionados- de las tres máximas categorías tendrán que esperar todavía más para conocer cuándo y contra quién inician el campeonato liguero de la temporada 2017/2018.
La RFEF adoptó esta decisión a última hora de la tarde de ayer y lo hizo tras llegar a un acuerdo con representantes de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y el Consejo Superior de Deportes (CSD), aunque sin precisar la fecha exacta de la celebración de unos actos federativos que quedan ahora en el aire con la detención de entre otros, su presidente, Ángel María Villar.
Pese a que en un primer momento se especuló con la posibilidad de que se cumpliera el calendario inicialmente establecido con la ausencia de Villar, que pasó la noche de ayer en un calabozo de Las Rozas tras asistir al registro de su domicilio particular y de la sede de la RFEF, lo cierto es que el rumbo de los acontecimientos varió radicalmente por la tarde, aunque de momento sólo se ha concretado oficialmente el aplazamiento de, entre otros actos, el sorteo de los calendarios.
El problema es que, si Villar, como parece probable en estos momentos, no puede acudir a la Asamblea de la RFEF, cuya junta directiva todavía no tiene asignados los cargos -este asunto se iba a resolver, en principio, hoy mismo-, el ente federativo tendría que organizarse de alguna manera. Según el artículo 34.7 de los Estatutos de la RFEF, “en supuestos de ausencia, enfermedad o cualquier otra causa que impida transitoriamente desempeñar sus funciones, el presidente será sustituido por los vicepresidentes en su orden, por el tesorero y, en última instancia, por el miembro de mayor antigüedad o por el de más edad si aquella fuera la misma”. Y aquí surgiría el problema de qué criterio aplicar, ya que los cargos, a día de hoy, todavía no han sido designados, ya que Villar inició su octavo mandato hace apenas un par de meses.
Otra de las opciones con la que han especulado diferentes medios de comunicación pasan por la creación de una junta gestora, aunque el presidente del CSD, José Ramón Lete, también abrió el abanico de posibilidades. “Vamos a esperar posibles acontecimientos. Si tenemos que tutelar, tutelaremos que la competición se desarrolle como debe”, anunció. - Efe/DNA
Reacción. La Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español (FASFE) publicó ayer un comunicado para manifestar como “de extrema gravedad” lo ocurrido ayer con la detención de Villar, además de para solicitar “un cambio radical” en la gestión del fútbol español.