vitoria - En medio de la noche oscura, la luz de una luciérnaga es capaz de iluminar el camino a seguir como un faro guía a un barco en la tormenta. Los pioneros poseen esa energía interior que es luz para los que vienen por detrás y todavía desconocen que más allá del telón existe un paisaje por descubrir, un territorio por conquistar. Mercedes Etchart, fallecida a los 94 años, perteneció a esa estirpe única de los exploradores que no se contentan con imaginar el futuro, que prefieren construirlo a través del arrojo y del talento. Mercedes Etchart, socia de la Real Sociedad de Golf de Neguri, fue una de las primeras mujeres que abrió huella en el mundo de golf, eminentemente masculino, cuando la jugadora bilbaina, que nació el 29 de noviembre de 1922, decidió dar un paso al frente. Con ese coraje que late con fuerza en los inconformistas, Etchart se enfrentó el porvenir meciendo el swing, aferrada a un palo de golf. Su destreza fue el báculo para avanzar a través de los campos de golf y sus clubes, colgados de las tradición, la liturgia y la solemnidad. Mercedes, guiada por su capacidad para leer los entresijos de los misterios del golf, un deporte repleto de matices, recovecos y secretos, supo adentrarse en solitario en un universo complejo y esquivo para las mujeres.
Etchart puso en valor la presencia de las mujeres en el golf en una época repleta de aristas afiladas, que ella supo esquivar con determinación. En las décadas de los 50, 60 y 70 del siglo pasado el golf era un monocultivo masculino. A pesar de ello, golpe a golpe, Etchart impulsó la pelota cada vez más lejos, ganando palmo a palmo, un espacio para las mujeres. No solo luchó contra los caprichos de los campos, también se distinguió como una magnífica embajadora de las mujeres. Su osadía situó en el mapa a las mujeres en el golf, su título más distinguido. La golfista vasca fue premiada en 1968 con la Medalla al Mérito en Golf. En el reconocimiento no solo se subrayaba su dominio del juego, también se incidía en su contribución a la ampliación del eco del golf entre las mujeres. Estupenda jugadora, Mercedes Etchart, cuyo linaje continúan Paola y Borja Etchart, mantuvo durante siete años, en el periodo comprendido entre 1961 y 1968, el handicap femenino más bajo en España (3.0).
campeona de europa Figura indiscutible del golf femenino en España, Mercedes Etchart apiló en su extensa trayectoria deportiva más de 300 trofeos, un museo de copas y galardones. Entre sus triunfos destacan sus siete Campeonatos de España Absolutos Femeninos (1951, 1959, 1960, 1962, 1963, 1964 y 1966). Una vitrina sin parangón. Nadie en la historia del golf español obtuvo tantas coronas. A sus victorias individuales, Mercedes Etchart sumó cinco triunfos en el Campeonato de España por Parejas (1958, 1960, 1963, 1964 y 1971). En una época en la que la participación de las jugadoras españolas escaseaba en competiciones de ámbito internacional, la jugadora vizcaina se impuso también en la Copa de la Reina de 1962 y cuatro veces en el Internacional Dobles de España (1962, 1964, 1966 y 1967), además de proclamarse campeona de Europa en 1961, la primera española en conseguir el citado cetro continental. En eso también fue la primera Mercedes Etchart.
Como miembro de la selección española hasta 1970, Mercedes Etchart también se midió en el escaparate internacional. Disputó los Campeonatos del Mundo de 1964 y 1966, además de los Europeos de 1961, 1963, 1965 y 1967. Con anterioridad, en 1961, la brillante jugadora vizcaina fue seleccionada para formar parte del equipo europeo en la Vagliano Trophy en su enfrentamiento ante el combinado de las Islas Británicas. A los 94 años dijo adiós. Con su fallecimiento el golf se apaga un poco, aunque su luz perdura.
Palmarés. Mercedes Etchart dominó el golf femenino español. En su vitrina lucen siete campeonatos de España Absolutos Femeninos. Venció en 1951, 1959, 1960, 1962, 1963, 1964 y 1966, más que ninguna otra en la historia. No solo destacó en las luchas individuales. La jugadora bilbaína consiguió la victoria en el Campeonato de España por Parejas en otras cinco ocasiones (1958, 1960, 1963, 1964 y 1971).
En el panorama internacional obtuvo el triunfo en el Campeonato de Europa de 1961 y disputó varios mundiales como miembro de la selección española de golf, que también le reclutó para la disputa de un duelo contra un combinado británico.