Yokohama - El Barcelona de Luis Enrique venció ayer por 3-0 al Guangzhou Evergrande con tres goles de Luis Suárez en la semifinal del Mundial de Clubes de Japón 2015, y disputará la final este domingo (11.30 horas) ante el River Plate. El Barça debutó en el torneo con un once atípico debido a la ya prevista ausencia de Neymar y a la baja de última hora de Leo Messi por un cólico nefrítico. Sus puestos en el tridente los ocuparon Munir por la derecha y Sergi Roberto en la izquierda.

Ante la falta de dos de sus mayores estrellas, Andrés Iniesta se erigió como faro del juego azulgrana y Luis Suárez asumió el papel de definidor. Ambos fueron los más destacados de un triunfo que concede a los catalanes la oportunidad de ser el primer equipo que gane tres Mundiales de Clubes en su formato actual.

Los culés acumularon hasta un 80% de la posesión en el arranque del partido y buscaron el área con triangulaciones, mientras el conjunto de Luiz Felipe Scolari defendía con todas sus líneas muy juntas y esperaba su oportunidad al contraataque. Pero al Barça le costó encontrar espacios. Cuando se acercaba el ecuador de la contienda, los de Luis Enrique se adelantaron gracias a un tiro desde fuera del área de Rakitic que el portero despejó mal, y que un Suárez al acecho cazó. Tras la reanudación, los blaugranas ampliaron su ventaja gracias a otro pase estelar de Iniesta, que Suárez controló con clase y transformó en gol. Con el segundo tanto los chinos bajaron los brazos y el Barcelona se hizo aún más dueño y señor del partido. El punta uruguayo anotó su tercer tanto de la noche nipona desde los once metros, tras un penalti protestado sobre Munir. Busquets, Sandro y Munir gozaron de ocasiones para ampliar la goleada mientras los chinos buscaron el tanto del honor sin llegar a crear verdadero peligro, pero el marcador ya no se movió.

El River argentino, que eliminó al Sanfrecce Hiroshima japonés, espera ahora al Barcelona en la final que se disputará el domingo en el mismo escenario, el Estadio Internacional de Yokohama. Está por ver si el jugador Leo Messi llega a tiempo a la cita, algo que nadie en el Barça ni confirmó ni desmintió. - Antonio Hermosín