vigo - El Celta conserva su cuarto puesto en la Liga después de ganar por la mínima al Espanyol, un triunfo materializado con una genialidad de Iago Aspas y no exento de sufrimiento para los celestes, ya que su rival tuvo un hombre más desde el minuto 46.
El Celta se adueñó del balón desde el inicio pero apenas creó peligro a un Espanyol bien plantado. Cuando los celestes parecían tener más controlado el duelo, despertó el equipo catalán, que rozó el gol. Reaccionó rápido el Celta, que volvió a generar peligro. Buscaba con ansia el equipo vigués el gol, y lo encontró al filo del descanso con una obra de arte de Iago Aspas: cogió la pelota en el centro del campo, se marchó con calidad del central Álvaro y con una espectacular vaselina levantó a los aficionados de sus asientos.
Al minuto de la reanudación el Celta se quedó con diez por la expulsión del chileno Tucu Hernández, pero ni eso hizo despertar a un triste Espanyol. Al equipo de Sergio González, que venía de ofrecer una pobre imagen ante el Levante, sólo lo salvó la falta de puntería de su rival. - Efe