Duración: 46:38 minutos; 8:54 de juego real.
Saques: 11 de Jaunarena (tantos 2, 3, 5, 6, 7, 8, 13, 17, 18, 19 y 20) y 2 de Zabaleta (tantos 7 y 11).
Faltas de saque: 1 de Zabaleta.
Pelotazos: 162 pelotazos a buena.
Tantos en juego: 5 de Jaunarena y 4 de Zabaleta.
Errores: 6 de Jaunarena y 5 de Zabaleta.
Marcador: 0-2, 2-2, 9-2, 9-7, 10-7, 10-8, 14-8, 14-11, 21-11, 21-12 y 22-12.
Botilleros: Ejercieron de botilleros Abel Barriola (con Jon Jaunarena) y Fermín Eskudero (con José Javier Zabaleta).
Apuestas: De salida se cantaron posturas de 100 a 60 favorables a Jaunarena.
Incidencias: Eliminatoria de octavos de final del Manomanista de la LEP.M disputada en el frontón Astelena de Eibar. Algo menos de media entrada.
bilbao. Once tantos de saque son demasiado, una lastra enorme, una piedra pesadísima en la mochila. Y más en el Manomanista, modalidad en la que se dice que "no hay trampa ni cartón". Pues bien, once saques fueron la única razón por la que José Javier Zabaleta se fue del Astelena a casa y por la que Jon Jaunarena se mece en los cuartos de final de la competición reina del año. Y es que, el zaguero de Etxarren estuvo bien en el peloteo, descarnado con Jaunarena pegándole mucho, pero en los momentos clave, dos tacadas con seis y cuatro saques, respectivamente, engordaron esa losa tan pesada que le hundió en Eibar. Mil kilos por saque. Una barbaridad. Demasiado plomo en los zapatos.
Acuñados como los pelotaris a reinar en los próximos años, su duelo particular comenzó con Zabaleta por delante. Pero rápidamente comenzó a flaquear con el servicio. Jaunarena es un pelotari que le da mucho a la pelota, sabe cómo jugar en el mano a mano y conoce las debilidades de su contrincante, a quien considera un gran amigo. Así que dio velocidad al disparo inicial para inquietar a su adversario. Lo que Zabaleta había logrado en el peloteo, soltándole al cuero, se vino abajo como un castillo de naipes en un abrir y cerrar de ojos. Los saques empezaron a condenarle demasiado pronto y la brecha se abrió a límites insospechados. Seis saques en una tacada de nueve tantos: es decir, apenas desgaste físico para Jaunarena, un 9-2 en el luminoso, la confianza hirviendo y Zabaleta encomendándose a la Virgen de los Milagros.
Aun así, se rehizo el zaguero dando buena imagen. Muchas veces el destino es demasiado cruel, pero el Manomanista es peor. A pesar de que se fajaron bien, de que se midieron, de que hicieron un intenso toma y daca, Zabaleta se levantó en armas hasta el 9-7 pero cayó en el intento, quizás por la falta de facilidad a la hora de terminar. Tiró de orgullo para nadar hasta la orilla, pero una falta de saque le volvió a condenar.
Entonces, en el reparto de golpes, llegó la parte más bonita del partido. Tanto Jon con José Javier se cubrieron de brillo para ponerse a deleitar al personal. Sin embargo de nuevo en el lanzamiento de la moneda, la cara era leitzarra. Jaunarena volvió a distanciarse en el luminoso, poco a poco, siempre delante, hasta el 14-11.
Una vez navegado a contracorriente todo el encuentro, a Zabaleta se le acabó el fuelle y el saque de Jaunarena le hizo un traje. Una tacada con cuatro disparos iniciales le pusieron la cosa empinadísima. Corrigió el rumbo con una contradejada preciosa desde el ancho, pero cruel la competición, Jaunarena no dejó más respiros al de Etxarren. 22-12.
Danel conoce rival en segunda Por otro lado, ayer se cerraron los cuartos de final del Manomanista de Segunda y Danel Elezkano, único vizcaino que queda vivo en la competición, ya conoce a su contrincante, Aitor Mendizabal. En el tercer partido del Astelena de Eibar, el delantero de Antzuola ganó con más facilidades de las previstas a Ibai Zabala (10-22) y se enfrentará la semana que viene con el tótem de Zaratamo. Asimismo, la otra semifinal la jugarán Álvaro Untoria contra Stephane Lemuno, quien ganó el sábado a Miguel Merino (11-22).