El día de los 'blues'

El culebrón entre Sergio Ramos y el portero del Bayern Múnich Neuer continúa. Después de que el equipo alemán, verdugo del Real Madrid en semifinales, perdiera la final de la Liga de Campeones frente al Chelsea, el defensa del equipo blanco se acordó de varios colegas en su cuenta de Twitter. Felicitó a Juan Mata y Fernando Torres por la victoria, mandó ánimos a Robben... y se tomó una pequeña venganza con Manuel Neuer, guardameta del conjunto bávaro. "Por cierto, no sabía que se le daban tan bien las finales a Neuer. ¡Otro año será! ¡Humildad siempre, campeón!", escribió Ramos, en respuesta a unas declaraciones que hizo Neuer tras el partido de semifinales, donde el madridista mandó a las nubes el lanzamiento decisivo de la tanda de penaltis. El portero alemán se mofó de Ramos en una entrevista con el diario Bild. "No sabía que a Ramos le gustara tirar los penaltis por encima de la portería", dijo entonces Neuer sobre el fallo del sevillano que tantas burlas generó. Tras el comentario de Ramos del sábado, ayer el portero no tardó en responder a Ramos, diciéndole vía Twitter que él al menos había marcado el penalti y jugado una final.

paseo triunfal del chelsea en autobús por el oeste de londres

la plantilla al completo del Chelsea celebró ayer con un desfile triunfal en autobús ante miles de hinchas en el oeste de Londres su primera Liga de Campeones, lograda en la tanda de penaltis de la final ante el Bayern de Múnich.

Sonrientes, vestidos de azul y luciendo la flamante Copa de Europa se mostraron ayer los jugadores del equipo londinense al arrancar un paseo victorioso en la parte alta de un autobús del mismo color del equipo y en el que se leía: Campeones de Europa. El trayecto fue desde su estadio, Stamford Bridge.

Con fuertes medidas de seguridad, las calles colindantes con el campo del Chelsea, situado al oeste de la capital británica, se abarrotaron de una multitud de seguidores -algunos de los cuales llevaban más de dos horas esperando- que hicieron ondear las banderas del club y vitorearon a sus campeones. Y es que el Chelsea logró en la final disputada en Múnich el primer título de Champions en su historia en una emocionante tanda de penaltis (3-4).

Fue un encuentro en el que resultaron claves para el once británico, dirigido por el italiano Roberto Di Matteo, el punta marfileño Didier Drogba y el guardameta checo Petr Cech. Ayer los dominicales británicos destacaron la "dramática" victoria del conjunto londinense y subrayaron el papel desempeñado por el jugador de Costa de Marfil. Para el multimillonario dueño del club, el ruso Roman Abramovich, se trató de un sueño hecho realidad desde que compró el equipo hace nueve años.

El delantero marfileño del Chelsea Didier Drogba, autor del penalti decisivo, aseguró que el triunfo de su equipo del sábado se debe al "increíble" espíritu de lucha del conjunto londinense. "Este título es por lo que hemos estado trabajando durante años y años. Es nuestro gracias a nuestro espíritu de lucha", declaró la estrella marfileña a la cadena británica Sky Sports.

"Llevo en este equipo ocho años y mis compañeros me enseñaron el camino. Cuando juegas en un club como el Chelsea sabes que no tienes que rendirte hasta el final", apuntó el delantero blue.

Drogba añadió también que intenta "involucrar ese espíritu de lucha increíble a los nuevos y a los jóvenes jugadores de la plantilla".

El exjugador del Olympique de Marsella, de 34 años, votado mejor jugador de la final, fue el artífice de la primera Champions League de la historia del equipo blue al transformar el último y definitivo lanzamiento de penalti.

El guardameta Petr Cech, de 29 años, se convirtió entonces en el héroe del equipo al detener el definitivo penalti al alemán Bastian Schweinsteiger. "Me sentí orgulloso de mis compañeros cuando conseguimos el empate ya que no fue fácil. Ya en los penaltis, adiviné el lado en cinco ocasiones y, cuando toqué el primer balón, sabía que iba a atajar al menos uno", aseguró el portero checo. "Al final conseguí atrapar dos, lo cual es fantástico, sobre todo por lo que significó para el equipo y para el club en general", apuntó el guardameta.

"No puedo describir lo que siento, estaba gritando y no sabía qué hacer. Vi que Didier (Drogba) estaba haciendo lo mismo que yo".