E L número 33 marca un antes y un después en Vitoria. 33 son los años que hace que la Vuelta a España no pasaba por la capital vasca. Las razones de esta sequía son muchas y nunca positivas. Pero las calles ya están cortadas y la gente preparada para ver a los grandes del ciclismo. Por eso, este año, gracias a la insistencia del alcalde Javier Maroto y el lehendakari Patxi López se rompe este vacío. La Junta de Gobierno del Ayuntamiento aprobó el contrato de patrocinio con el organizador, que tendrá un coste para las arcas municipales de 109.600 euros. De esta cantidad, el Consistorio recuperará directamente en torno a 60.000 euros a través de una subvención del Gobierno Vasco. Desde el Ayuntamiento, por tanto, valoran muy positivamente la llegada de los ciclistas. "Son muchos los vitorianos y vascos en general que se sienten desde siempre ligados al deporte de la bicicleta. Es una extraordinaria oportunidad para ver de cerca a los ídolos de este deporte y a los numerosos corredores vascos que militan en los distintos equipos", aseguró el alcalde en el transcurso de una rueda de prensa que ofreció hace unas semanas.
Entre los vitorianos, sin embargo, hay diferentes maneras de ver la llegada a Vitoria de los ciclistas, aunque lo que ya es evidente es que el número de reservas de hoteles para el día de hoy no ha aumentado. Los hoteleros confiaban en que fuera mucho mayor a pesar de que el pelotón no se pondrá en marcha mañana en la capital alavesa. A día de hoy no están llenos y "las reservas son similares a las de un fin de semana normal de septiembre", aseguran desde el Gran Hotel Lakua.
Por su parte, los clubes vitorianos de ciclismo mantienen una opinión unánime. Están de acuerdo en que la Vuelta pase por la capital alavesa. Siendo aficionados a este deporte es la mejor manera de ver a los profesionales y disfrutarlo en vivo. "Me parece bien, es un evento deportivo que va a traer prestigio a Vitoria. Lo más importante es que para la gente de la ciudad que adora el ciclismo es una oportunidad para ver de cerca a los grandes del ciclismo nacional", declara Marcelino Ruiz, presidente del club ciclista Ariznavarra. En la misma línea se expresa Ricardo Suso, presidente de Bicilokura: "Estoy encantado, porque hace muchos años que no pasaba por aquí. A la gente que nos gusta este deporte lo vemos con muy buenos ojos. Por eso no entiendo que haya gente que no lo acepte. No es por cuestiones deportivas". Alejandro Ibañez de Gauna, al frente del club Abendaño, asegura que "es algo estupendo y muy bonito". "Hace tiempo que esperábamos que llegara aquí, ahora lo importante sería mantenerlo durante más años", dice.
opiniones varias Además hay muchos ciudadanos vitorianos que sienten verdadera pasión hacia este deporte y lo ven con muy buenos ojos. "El hecho de que la Vuelta pase por Vitoria me parece bien, porque no hay que mezclar política con deporte. Además, si a la gente no le importa que los equipos vascos de fútbol y otros deportes jueguen la Liga española y los ciclistas pueden correr en el Tour de Francia y el Giro, no entiendo por qué se molestan con esto. Es muy positivo por la afición que hay en el País Vasco", declara Aitor Ordorika, gran aficionado al ciclismo.
Lo más destacado de este tema sobre la buena o mala acogida de la Vuelta a Vitoria es que la Federación Alavesa de Ciclismo, y su presidente Florencio Martiarena, no quieren opinar al respecto. No se posiciona ante la llegada de los ciclistas a la capital alavesa.
Sin embargo, no todos los vascos están de acuerdo en que la Vuelta entre en nuestra comunidad y ya se han llevando diferentes actividades para demostrarlo. Un caso es el de ESAIT (Euskal Selekzioaren Aldeko Iritzi Taldea). Se definen a sí mismos como una entidad nacional, abierta, participativa y vasca con un objetivo claro, que es lograr la oficialidad de las selecciones de Euskal Herria y su participación en campeonatos oficiales internacionales. ESAIT considera que los vascos están ante una imposición y por ese motivo deben reivindicarse. "No ha venido, la han traído y lo han hecho para reivindicar España". Asimismo, dicen estar "a favor de los ciclistas, pero en contra del uso que hacen de ellos", declara Mikel Uzkudun.
Como actividad principal realizaron la carrera Vitoria-Bilbao, de forma inversa a la oficial de la Vuelta España. Más de medio centenar de ciclistas recorrieron, entre otras, las localidades de Durango, Elorrio, Arrasate-Mondragón, Bergara, Eibar o Galdakao para finalizar en Bilbao. A la marcha se sumaron en algunos momentos varios ediles de Bildu de distintos ayuntamientos. La plataforma, apoyada por diferentes partidos políticos cercanos a la izquierda abertzale, realizó varias concentraciones ayer en el Alto de las Muñecas de Sopuerta (Bizkaia) y en Bilbao.
Guste o no a los vitorianos, por primera vez después de 33 años el País Vasco recibe la Vuelta a España. Y Vitoria es hoy la meta.