Javier Mascherano, centrocampista argentino del Barcelona, lamentó ayer que "casi no se hable de fútbol" y justificó las palabras de su entrenador, Josep Guardiola, sobre el arbitraje de la final de la Copa, del que dijo que se "sacaron de contexto sus palabras. Queremos un partido limpio y sin teatro y a este equipo le interesa un partido en el que se juegue al fútbol. Lo más importante es hacer las cosas dentro del campo".