Vitoria. Apuntaba Sebastian Vettel después de firmar la mejor vuelta en la tanda de calificación del sábado que "todavía no hemos ganado nada". Feliz, pero cauto, ayer fue el mismo. El alemán, a pesar de empezar 2011 como acabó 2010, de la mejor manera posible, ganando, clama a la prudencia, más si cabe, dado el grado de incógnitas que agitan el paddock, que ponen alfombra roja a la tensión, a la actividad, al trabajo por realizar, porque la rueda del desarrollo no deja de girar. "Trato de seguir diciendo al equipo que tenemos que mantener los pies en el suelo. Tenemos un montón de puntos, que es muy importante y nos hemos divertido, que es aún más importante. Se trata de la primera carrera del año y todavía pueden ocurrir un montón de cosas", advirtió el campeón del mundo.

En cuanto a la prueba, Vettel añadió trascendencia a su triunfo, a pesar de no encontrar grandes oposiciones. "La salida ha sido crucial. Hice una buena salida, pero no sabía si lo suficiente hasta que vi a Lewis (Hamilton) y Mark (Webber) luchando por posición. En el primer relevo he tratado de mantener una ventaja y, entonces, a cuidar los neumáticos para ver la degradación", relató sobre la que calificó como "una carreras sin problemas" y tras la cual, mandó a sus mecánicos a comer una "pizza" y beber unas "cervezas".

"Podemos estar orgullosos de nosotros mismos. Hace dos semanas no esperábamos estar cerca de los cinco primeros y hemos terminado segundos con un coche más fiable", apuntó por su lado Lewis Hamilton, que dijo que no pudo hacer nada para alcanzar la estela de Vettel.

Vitaly Petrov, que dio a Rusia su primer podio en la historia de la Fórmula 1, narró de este modo la maniobra que le permitió alcanzar el cajón: "La salida no fue mala e intenté atacar a Fernando, y luego vi a Jenson Button por delante, así que por qué frenar antes. Facilité la frenada e intenté pasar a las dos lo que resulto genial". Luego, "he controlado la carrera cuando se acercaba Alonso".

Precisamente el asturiano lamentó el arranque de la prueba. "Me quedé en el lugar equivocado". Sin embargo, de haber tenido un inicio más afortunado, tampoco hubiera habido un desenlace muy diferente, según el piloto ovetense. "Si hubiese salido normal igual habría adelantado a Button o a Webber, pero hubiera quedado tercero o quinto. Aunque hubiera sido una carrera más tranquila", repasó. Apeló Alonso a la mejora, aunque no vio tan "estratosféricos" a los Red Bull y emplazó "más guerra" para Malasia.