madrid. El Real Madrid afronta hoy uno de los momentos claves que marcan una temporada en su visita al Olympique de Lyon (20.45 h. TVE1), el último verdugo, rival francés que vuelve a cruzarse en su camino a la soñada décima Copa de Europa en unos octavos de final ya malditos, tras no superarlos en las últimas seis temporadas. Derrumbar un muro psicológico que se ha instalado en la cabeza de los jugadores madridistas en las últimas temporadas. Es el objetivo de José Mourinho, que conoce al detalle los sonoros fracasos europeos que ha protagonizado el Real Madrid en sus últimos intentos por recuperar el prestigio perdido en Europa.
Para ello fue contratado el actual ganador de la Liga de Campeones con el Inter de Milán. Enfocado al momento que llega ha ido encaminado todo su trabajo. La recuperación de autoestima del grupo. La creación de un modelo de juego con variantes para días señalados. La fe en sí mismos para destrozar una barrera psicológica.
Qué mejor forma de demostrarlo al fútbol europeo que ante su último verdugo, el Olympique de Lyon que la pasada temporada destrozó sueños madridistas y fulminó la poca fe que le quedaba a la directiva en el chileno Manuel Pellegrini. En esta ocasión, el Madrid llega a los octavos de final en un buen momento. Recuperado el buen tono físico tras un mes de enero agotador, repleto de partidos. Con jugadores frescos por las rotaciones de Mourinho y otros, como Cristiano, a los que el hambre de éxito les conduce a jugar todo sin bajar su rendimiento.
Dispone Mourinho de la posibilidad de alinear su once de gala -salvo la ausencia por lesión de Gonzalo Higuaín- y maneja variantes. Gana opciones la posibilidad de jugar con un trivote en la ida, para atacar en la vuelta del Bernabéu. En ese caso al indiscutible Xabi Alonso le acompañarían Lass Diarra y Khedira.
En el ataque con Özil y Cristiano con puesto asegurado, Adebayor se impondría por sus características de juego a Benzema. Y la decisión más importante de Mourinho llegaría en defensa. Planea una nueva suplencia de Sergio Ramos, a no ser que las intenciones defensivas trasladen a Arbeloa al lateral izquierdo en detrimento de Marcelo.
Mientras, el Olympique llega en su mejor estado de forma tras un inicio de temporada tormentoso. El conjunto francés ha resuelto sus dos últimos partidos con goleadas ante su más enconado rival, su vecino el Saint Etienne (1-4), y el Nancy (4-0). La crisis de hace unos meses, con el equipo en los puestos de descenso y el entrenador al borde del despido, ya es historia. Además el Olympique no ha perdido nunca en los seis partidos que ha disputado contra el Real Madrid.
delgado por Lisandro La única mala noticia en medio del estado de euforia actual en las filas galas es la baja de Lisandro López. Su nombre no figura en la lista de convocados debido a una lesión en los isquiotibiales. Su puesto como delantero, aunque escorado a la derecha, será seguramente ocupado por el también argentino César Delgado, un jugador con un perfil goleador mucho más bajo.
Delgado compartiría entonces la tripleta de centrocampistas ofensivos con el brasileño Michel Bastos, pegado a la banda izquierda, y el francés Yoann Gourcuff. En punta se situará como único referente Bafétimbi Gomis. Claude Puel sí podrá contar con su portero titular, Hugo Lloris, que se perdió el partido ante el Nancy al sufrir una rinofaringitis y al parecer está ya totalmente recuperado. En la alineación titular es muy probable que figuren siete jugadores del once que dio la campanada la pasada temporada en el Santiago Bernabéu.