Vitoria. "Con el tiempo la gente se dará cuenta de lo que está consiguiendo Juan, pero ahora no se valora lo suficiente. Lo que ha hecho hasta ahora es increíble". Es la certera autopsia que despliega Jokin Etxaniz, director técnico de Aspe, sobre la cuarta txapela del Manomanista (octava contando las tres del Parejas y la del Cuatro y Medio) conquistada por el delantero de Ibero el domingo en el Ogueta de Gasteiz ante Xala. La lanuda corona de laurel, la vitrina, no es para el preparador de Bergara lo que distingue al delantero de Ibero, lo que establece su verdadero impacto sobre el juego, a pesar de la indudable jerarquía que los trofeos generan en el imaginario colectivo. "Da la sensación de que sólo se tienen en cuenta las txapelas, pero lo que supone Juan para la pelota va más allá de los títulos. Es extraordinario, capaz de sorprender continuamente".
Dice Jokin Etxaniz, que entrena semanalmente con Martínez de Irujo, que aún se siente "anonadado por las cosas que es capaz de hacer en la cancha". "Tal vez es porque he jugado a pelota y sé lo difícil que es hacer ciertas cosas y por eso le doy tanto valor a lo que realiza. Lo mismo les pasa a los pelotaris que le ven entrenar o jugar. Sus comentarios son de sorpresa, de admiración, porque son conscientes de la dificultad que entraña llegar a ese nivel de juego", desgrana Jokin Etxaniz, contrariado porque se cuestione su alcance con el señuelo del material, el metro patrón para algunas voces, casi todas de ellas pretéritas.
"Sinceramente, creo que Juan tendría el mismo potencial con el material de antes que con el de ahora porque sus cualidades son extraordinarias. Nunca he visto a un pelotari tan completo. Estoy un poco cansado de los entendidos que dicen que Juan es lo que es por el material. Soy de la opinión que con aquellas pelotas seguiría siendo un fenómeno. Da la sensación de que uno es bueno o se le valora de verdad cuando se retira, pero Juan está marcando una época", desgrana el técnico guipuzcoano, convencido de que a Martínez de Irujo el porvenir le seguirá sonriendo porque "si le respetan las lesiones, viendo el nivel de juego que tiene, le vienen unos años iguales o mejores".
Vislumbra Jokin Etxaniz en el delantero de Ibero "el poso y el saber estar que da la edad, la experiencia" y eso le hace "más completo sobre la cancha, ha ganado en visión táctica". "Sigue jugando igual, utilizando mucho el juego de aire. La única diferencia es que no juega con tanta ansia. Ahora sabe recular, mientras que antes siempre daba el paso al frente. Para mí, es más una cuestión de edad, de madurez, que de forma de jugar", argumenta el técnico de la empresa eibarresa sobre Martínez de Irujo, que enfundado en la casaca roja de campeón disputará la friolera de seis partidos en los próximos ocho días. "Pero ahora lo haré sin presión, disfrutando", calcula el delantero de Ibero, un manista "increíble", enfatiza Jokin Etxaniz, que observa más allá del podio de las txapelas.