Vitoria. No es el Euskaltel-Euskadi uno de esos equipos acostumbrados a acabar el año con un buen número de carreras en el zurrón. Ese papel corresponde más a equipos como el HTC-Columbia, el Quick Step o el Saxo Bank. Conjuntos que acostumbran a ganar por encima de 30 carreras por temporada. Este 2010 sin embargo va camino de convertirse en unos de los más prósperos en la historia del equipo de la fundación Euskadi. Dejando de lado los pesos pesados del equipo (Samuel Sánchez, Igor Antón y Koldo Fernández de Larrea), los ciclistas a los que Igor González de Galdeano exigía dar un paso más en su carrera comienzan a levantar el vuelo. Ahí están los resultados obtenidos entre otros, por Rubén Pérez, Pablo Urtasun, Iván Velasco o Juanjo Oroz. Pero resulta que está temporada, los jóvenes también comienzan a prodigarse. Tras el brillante abril de Beñat Intxausti, ayer fue el turno de Gorka Izagirre.
El ciclista de Ormaiztegi estrenó ayer su palmarés en la cuarta y última etapa de la Vuelta a Luxemburgo, prueba cuyo vencedor final ha sido el italiano Matteo Carrara (Vacansoleil). Y lo hizo ante rivales de renombre. El joven de 22 años se metió en un pequeño grupo de escapados compuesto por el líder de la carrera Matteo Carrara, Steve Houanard (Skil-Shimano) y Serguei Ivanov (Katusha), que se adelantaron al pelotón en la última vuelta al circuito de Luxemburgo. El ciclista de Euskaltel no era el favorito en las apuestas por el triunfo de etapa, pero finalmente consiguió sorprender a sus compañeros de fuga y llevarse la última etapa de la carrera.
"La verdad es que me siento muy satisfecho. He memorizado el trazado del circuito para buscar mi oportunidad, había un repecho bastante exigente y he probado fortuna", indicó el de Euskaltel. "He lanzado un par de ataques y me he marchado solo, pero me han cogido por detrás el líder Carrara, Ivanov y un Skil. Me he puesto a su rueda y en los últimos metros he sido el más rápido. Ha sido muy emocionante", destacó el ciclista guipuzcoano.
La etapa de 191 kilómetros partió de Mersch con un pelotón de 103 corredores. De inicio se formó una fuga con Jonathan Catroviejo (Euskaltel-Euskadi), Pavel Brutt (Katusha), Vataustas Kaupas (CT Differdange), Mitchell Docker (Skil Shimano), Sebastien Turgot (Bbox) y Jorge Martín Montenegro (Andalucía-Cajasur). Tras obtener una renta máxima en torno a los tres minutos, el grupo de escapados fue absorbido al inicio de la primera de las cinco vueltas que debían completar al circuito que recorría las calles del principado. Entonces, la tormenta y los fuertes chaparrones hicieron acto de presencia, obligando a los jueces de carrera a suprimir los dos últimos pasos por el circuito.
Los ataques se sucedieron, hasta que en la última vuelta el cuarteto formado por Izagirre, Ivanov, Carrara y Houanard logró soltarse. Izagirre mostró sus cualidades y se jugó la victoria con sus compañeros de fuga, a quienes sorprendió en los últimos metros para anotarse el triunfo, estrenar su palmarés y dar al Euskaltel-Euskadi su séptima victoria de la temporada, en la que hasta seis hombres diferentes han conseguido alzar los brazos.
Matteo Carrara se proclamó vencedor final de la ronda, escoltado en el podio por Frank Schleck (Saxo Bank) y el estadounidense Lance Armstrong (Radioshack), tras la decisión de los jueces de no contabilizar los tiempos de la última etapa en la clasificación general.