Con la danza siempre en la maleta
Valencia es el último destino de un nuevo programa de viajes formativos impulsado por el Conservatorio de Danza José Uruñuela
La comitiva no ha sido pequeña, precisamente. Entre alumnado y profesorado, alrededor de una treintena de personas han tomado parte en este nuevo viaje formativo del Conservatorio Municipal de Danza José Uruñuela, una apuesta por conocer otros centros y maneras de hacer, una iniciativa que también sirve para crear redes y relaciones entre la capital alavesa y otras ciudades y espacios culturales y educativos.
Hace ya tres años, en el centro dependiente del área de Cultura del Ayuntamiento de Vitoria se vio la posibilidad de impulsar este tipo de viajes, llevándose a cabo ya en Madrid y Barcelona. Se trata de buscar otros conservatorios profesionales y superiores de danza de diferentes comunidades autónomas. “Queremos conocer otro profesorado y establecer relación con alumnado del mismo nivel de danza”, describe Ana María Lebrero. Como explica Arantzazu Susunaga, jefa de estudios del centro gasteiztarra, no es tan habitual que conservatorios como el gasteiztarra desarrollen este tipo de ideas. “La experiencia de visitar otros conservatorios de danza y conocer su funcionamiento es muy constructiva”, remarca Lebrero.
“Tengo la suerte de tocar en Rambalaya, en una máquina muy bien engrasada”
En tierras valencianas
Lo cierto es que la reciente estancia en Valencia ha dado para mucho. La comitiva alavesa ha estado en el Conservatorio Profesional Municipal de Danza de Riba-roja de Túria, en el Conservatorio Profesional de Danza de Valencia y el Conservatorio Superior de Danza de Valencia Nacho Duato. Además, se ha tenido la oportunidad de conocer Espai LaGranja, el centro de recursos y mediación para la danza y las artes del movimiento del Institut Valencià de Cultura.
“Berlanga consideraba ‘Plácido’ como su mejor película”
En este último lugar, el alumnado recibió una clase magistral impartida por Elena Iglesias, nombre de referencia en la escena internacional. Todo un lujo, sin duda. Otro llegó de la mano de la artista y coreógrafa Cristina Gómez, con quien también se mantuvo un encuentro en torno a su trayectoria.
El verso de Cataluña, País Vasco y Asturias
“La acogida recibida ha sido excepcional en los cuatro centros y tanto el alumnado como el profesorado nos han hecho sentir como en casa”, describe Lebrero en torno a este nuevo viaje formativo.