El rapero argentino Trueno, Mateo Palacios, presenta este domingo en el Festival de Jazz de Vitoria su último trabajo, El último baile, un "disco diferente que hice viajando por el mundo, con temas en España, otros en Estados Unidos", lo que le da "una energía especial a cada canción".
El primer disco fue más "autobiográfico hablando de mi barrio, mis valores, mi país", y el segundo, "habla un poco más de mi raza, de lo que me pasó conociendo otros países y reconociendo también que conformo parte de un lugar en el mundo, con su cultura y sus raíces", asegura. En su tercer trabajo se centra en transformar en música sus vivencias "porque cada país, cada ciudad, cada comunidad tiene una cultura diferente" y eso "es una locura" de la que "trato de aprender mucho".
Trueno clausurará este domingo el Festival de Jazz de Vitoria con un concierto en Mendizorroza en el que el joven presentará parte de su "último baile", un disco dedicado a la comunidad del rap.
Desde las batallas de gallos
Con una carrera meteórica, el joven talento de las batallas de gallos recorrerá los temas de su tercer disco, aunque también esas canciones que "la gente espera escuchar" de trabajos anteriores, compartiendo su pasión por "la epidemia mundial del rap" que le acompaña desde la cuna. Este artista y freestyler argentino, originario del barrio de La Boca, en Buenos Aires, es ante todo rapero, así se reconoce a sí mismo ya que para él no solo es su trabajo y su pasión, sino que es su manera de ser y de pensar.
El artista, criado en la música desde que ya con cuatro años acompañaba a la banda de su padre, saltó al estrellato en las batallas de gallos, un espectáculo "espontáneo y divertido", como lo describe, y que usó durante años como "medio de expresión". Ya asentado en la música de estudio y con giras por todo el planeta, Trueno reconoce que le debe mucho a este formato, pero que llegado el momento sintió que debía alejarse del "quién gana y quién pierde" para "decir más allá de competir con otra gente o de confrontarme".
Este tercer trabajo es "un disco para mí muy importante, porque es una entrega a mi comunidad, al movimiento del hip hop, que fue lo que me crió también en cierta parte en mi vida".
Como ha reconocido, "mi padre está en la cultura desde antes de que yo nazca, y mi manera de ser y los pensamientos que yo tengo son gracias al rap también".
50 años del hip hop
Trueno se une con este disco a la celebración de los 50 años del hip hop, una cultura que es "una mitad" para él, y en la que se siente con el "deber también de impulsar a la gente de mi edad, que representa lo mismo que yo" porque "nosotros somos la nueva escuela y tenemos que conformar los siguientes 50 años".
Con apenas 22 años ya lleva más de diez sobre los escenarios y ocho de carrera musical, aunque confiesa que "me siento un principiante en la música y siempre tengo mucho que aprender", por lo que en la gira que le trae a Vitoria "trataré de absorber la mayor información posible".
Para Trueno el rap vive un gran momento, de auge y de transformación, porque aunque todos los géneros musicales han entrado en momentos en los que se les pone en duda, señala, "la música en general es inmortal, y el rap en cualquier idioma y cualquier lugar del mundo está al mismo nivel".