Hace una semana se conoció la sentencia definitiva del caso Kote Cabezudo que condenaba al fotógrafo donostiarra a 28 años de prisión como autor de los delitos de agresión sexual, abusos y pornografía infantil. Una sentencia que llegaba algo más de tres meses después de que la plataforma Disney+ decidiera cancelar la emisión de la docuserie En el nombre de ellas, el mismo día en que iba a ser emitida.

Después de la gran decepción que su cancelación supuso para las víctimas que habían decidido prestar su testimonio para la producción, Netflix, a través de Álvaro Díaz, su responsable de contenidos de no ficción, ha sido quien ha dado un paso adelante con la compra de los derechos de En el nombre de ellas para su próxima emisión, todavía, eso si, sin fecha concreta.

AGRADECIMIENTO

Cuando el 23 de noviembre se supo que Disney+ se echaba atrás, las víctimas aseguraron que la compañía había jugado con su dolor. “Nuestra decisión de contar en un documental lo que sufrimos a manos de Cabezudo y después a manos de la Justicia representada en la magistrada Ana Isabel Pérez Asenjo, ha sido un proceso extremadamente traumático”.

Ha tenido que ser justo el 8 de marzo cuando les haya llegado la buena noticia de que la serie finalmente verá la luz. “Esperamos que a través de nuestra historia, muchas personas puedan sentir la fuerza para romper su silencio. Que sirva para que los profesionales de todos los ámbitos tomen conciencia de lo que supone este tipo de hechos y que la sociedad empiece a verbalizar esta cruel realidad silenciada”. En un comunicado, afirman que “la verdad solo tiene un camino y dar un paso al frente es un acto de valentía”.

Se muestran también agradecidas con la productora Señor Mono, responsable del proyecto. “Nos prometió no parar hasta conseguir que se diera a conocer nuestra historia y así ha sido”. Agradecimiento que extienden a Netflix, señalando que “ha decidido darnos la voz que un día nos quitaron, pero gracias a ellos, nadie más lo hará”. Asimismo, Iñigo Pérez Tabernero y Eduardo Mendoza, productor ejecutivo y director de la docuserie, afirman a través de una carta que la historia de este caso es “el terrible relato de cómo un depredador sexual estuvo durante más de 30 años abusando de mujeres, muchas de ellas menores. Un proceso judicial absolutamente absurdo y que se prolongó durante más de 10 años, generó una profunda revictimización secundaria en las víctimas”.

Insisten en que, “como periodistas, nos dedicamos a narrar estrictamente los hechos del proceso judicial y será el propio espectador el que sacará sus propias conclusiones. Y creemos que no dejará indiferente a nadie”.