Aunque son varias y conocidas las esculturas con las que Casto Solano ha ido construyendo en las plazas y calles de Gasteiz un particular recorrido artístico, es indudable que, desde hace ya mucho tiempo, la labor del creador navarro residente en la capital alavesa se encuentra repartida por no pocas partes del mundo. El año 2022 que ya se acaba de despedir no ha sido una excepción en cuanto a esta senda, incluso a pesar de la situación global con respecto al covid. Tampoco lo va a ser un 2023 en el que esperan hacerse una realidad palpable varios proyectos. Todo ello a un lado y el otro del Atlántico.
Durante los últimos doce meses, Casto Solano y su equipo han instalado nuevas obras de arte tanto en Antrim (Irlanda del Norte) como en Brighton (Inglaterra). En el primer caso, a media milla de la localidad atravesada por el río Six Mile Water se encuentra el Neagh, donde se ha ubicado la pieza The Giant: The Protector at the Lough, “un guardián mitológico-ecológico” instalado a orillas del mayor lago de la isla de Irlanda, una obra hecha para integrarse “profundamente tanto con el paisaje como con las narrativas de la gente de Antrim”.
La creación, que toma como referencia la figura del gigante Finn Mac Cool, se ha instalado en el exterior de un nuevo centro de divulgación y cuidado del patrimonio local llamado The Gateway. El objetivo de este proyecto, por parte de sus impulsores en Irlanda del Norte, era crear una obra de arte que se integrara en el folklore, la cultura, los ecosistemas y el paisaje que rodea al lago y a Antrim, una idea que Solano no ha perdido de vista.
Bien diferente es la propuesta que ya es una realidad en Brighton, una conocida localidad turística de la costa inglesa, muy visitada porque se encuentra a poco más de una hora de distancia en tren desde Londres. Aquí se ha ubicado The Whalebone Arch, un homenaje a este lugar y al Atlántico, “a la fuerza vital y los ciclos de la vida”, a sus comunidades de pescadores y al recuerdo que siguen legando a las generaciones futuras.
De todas formas, el trabajo no para y para el año que acaba de comenzar, Casto Solano, desde su estudio en la capital alavesa, ya tiene varios proyectos que van a materializarse en los próximos meses, en este caso y de manera primordial al otro lado del Atlántico. Así, en Canadá (más en concreto, en Surrey, en la Columbia Británica) se podrá ver On the living river. Todo el resto de piezas planteadas para 2023 se desplegarán por distintos puntos de Estados Unidos: Sarasota (Sarasota Seagrass), Boston (Vine Street), Tucson (Tomorrow is today), Oklahoma City (Baobab) y Jacksonville (Jaguar). Así se irá materializando según transcurra el calendario.
