pretemporada
El Alavés volverá al trabajo el 3 de julio
Mucha Muchacha retrata a la mujer actual a través de la danza
La compañía presenta hoy en un Félix Petite todavía con entradas su primer montaje
En plena dictadura de Primo de Rivera, cometieron la osadía de pasear por la puerta del Sol madrileña sin sombrero. De ahí vino un nombre que sirvió para aglutinar a una serie de artistas –no solo escritoras– que cuando se habla de la Generación del 27 se tiende a olvidar. Es su huella, y también su invisibilización, lo que llevó a Mucha Muchacha a abrir un proceso de investigación que terminó por concretarse en una primera producción que la compañía de danza trae hoy a la capital alavesa. “Queremos coger el relevo para conseguir lo siguiente”, apunta Belén Martí Lluch, quien conforma este proyecto junto a Ana Botía, Marta Mármol, Chiara Mordeglia y Marina de Remedios,
El encuentro con el público se va a producir a partir de las 19.30 horas en el Félix Petite (centro cívico Ibaiondo), donde todavía quedan entradas a la venta. A partir de ahí, los espectadores se sumergirán en una propuesta “que habla de nosotras como jóvenes que están en este tiempo y en este lugar, en Europa”, un “retrato de la mujer actual y de un momento”, una mirada que se construye a través del baile, de un trabajo coreográfico y dramatúrgico para el que se ha contado con la compañía La Tristura a través de la persona de Celso Giménez.
“Este primer espectáculo queríamos que fuera toda una declaración de intenciones” tanto en cuanto al tema a tratar pero también con respecto a cómo hacerlo. Al fin y al cabo, todas las intérpretes, que hoy tienen entre 25 y 27 años, vienen de una formación reglada que aquí desbordan para, sin despreciar lo aprendido, ir mucho más allá y sentirse “libres”.
En ese “ensanchar” el lenguaje de la danza, Mucha Muchacha toma como ejemplo “la rebeldía de aquellas mujeres” de la Generación del 27 para preguntarse qué pueden hacer ellas en el tiempo presente a través de la creación escénica. No en vano, el espectáculo que lleva el mismo título que el nombre de la compañía es el resultado de un proceso de investigación iniciado hace seis años en torno a mujeres como Maruja Mallo, Marga Gil, María Teresa León, Concha Méndez o Rosa Chacel.
De ese proceso de reflexión nació un proyecto centrado en los conceptos de empoderamiento, determinación, voz, participación, libertad y cooperación. “Queremos hablar del ahora, de lo que está sucediendo, de cómo nos sentimos dentro de este tiempo”.
Todo ello se habla aquí a través del movimiento. “Es un montaje en el que soportamos una energía muy importante, en el que tenemos la sensación de sostener un legado”, aunque mejor no dar demasiados detalles sobre algunos aspectos de la obra para mantener la sorpresa de cara al público.