- La 94 edición de los Oscar no era una más, y no solo por la vuelta a la normalidad tras la pandemia, sino por el esperado mensaje de apoyo a Ucrania. Incluso actores como Sean Penn habían llamado a boicotear la ceremonia si se vetaba la aparición del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, en la gala por vía internet. Un apoyo que finalmente se materializó solo en un minuto de silencio acompañado de tres mensajes de texto anónimos contra la invasión rusa.
Pero si por algo pasará a la historia esta edición no será por su apoyo a Ucrania, ni por las justas o injustas concesiones de las estatuillas. Será por la bofetada -montaje o no- que Will Smith le propinó en directo a Chris Rock después de que el cómico hiciera una broma sobre Jada Pinkett Smith, la esposa del flamante ganador del Oscar como actor protagonista por su interpretación en King Richard, de Richard Williams, el padre de las superestrellas del tenis Venus y Serena.
Mientras presentaba el premio de la academia de Hollywood al mejor documental, Rock se dirigió a la mujer de Smith, que ha reconocido que padece alopecia, y lanzó la frase: "Jada, te amo, G.I. Jane 2, no puedo esperar para verla". Con esta frase hacía referencia a la popular película La teniente O'Neil (G.I. Jane), en la que la protagonista, Demi Moore, aparece rapada. Tras escuchar la broma, Smith subió al escenario del Dolby Theater y aparentemente golpeó en la cara a Rock, antes de gritarle: "Manten el nombre de mi esposa fuera de tu puta boca".
Rock, aún desde el escenario, trató de quitarle hierro al asunto. "Will Smith me acaba de dar una buena", dijo, pero Smith siguió gritando. Ya después de una pausa Rock bromeó con resolverlo en la fiesta posterior a la ceremonia, sin que los asistentes ni la prensa acreditada tuvieran claro aún si lo que habían visto era real o simulado.
No es la primera vez que Chris Rock se mete con el matrimonio Smith. En la gala de los Oscar de 2016, la pareja intentó boicotear la ceremonia ante la falta de diversidad en los nominados. "Jada boicoteando los Oscar es como yo boicoteando las bragas de Rihanna... No fui invitado... Esa no es una invitación que rechazaría", bromeó Rock entonces.
El incidente, que eclipsó la ceremonia, ha dividido a las redes sociales. Chistes como que Will Smith tenía que haber recibido el Oscar al mejor actor de reparto (de bofetadas), se intercambiaron con mensajes como que "podría hacer historia como el primer actor en ganar un Oscar y ser detenido por agresión en la misma noche".
Otros usuarios de las redes se dedicaron a cuestionar la agresión y calificarla de montaje, al igual que en un principio el público que asistió a la gala, que dudaba si la bofetada era real o parte del show. Incluso numerosos periódicos de todo el mundo proponían ayer a sus lectores votaciones sobre las verdaderas intenciones de Will Smith.
Montaje o no, el bofetón ha conseguido que Will Smith y Jada Pinkett Smith estén ahora en la boca de todos. Con un matrimonio abierto, los Smith han reconocido que su pareja resiste por la comunicación y la confianza a pesar de las infidelidades.
De momento, la policía de Los Ángeles asegura que Chris Rock, que conoce al actor desde hace más de diez años, no ha presentado cargos contra Will Smith, pero la Academia de Cine de Hollywood ha abierto "una investigación formal" en la que estudiará futuras acciones según la ley de California.
El resto del protagonismo de la noche se lo llevó, lógicamente, el cine. Como ya figuraba en la quiniela de los últimos días, la gran derrotada de la noche fue El poder del perro, que partía con 12 nominaciones. Al final, la neozelandesa Jane Campion solo logró el Oscar a la mejor dirección. Campion se convierte así en la tercera mujer en conseguir el reconocimiento de la Academia de Hollywood a mejor dirección, después de Kathryn Bigelow (En tierra hostil) en 2010, y Chloé Zhao (Nomadland), quien se coronó el año pasado.
Fue CODA, dirigida por otra mujer, Sian Heder, la que se alzó con el premio a la mejor película, al mejor guión adaptado y al mejor actor secundario (Troy Kotsur) llevándose así los tres premios a los que optaba. Nunca una película que no hubiera estado nominada a mejor montaje y mejor dirección había ganado el Oscar. El éxito de esta película ha sido una "sorpresa dilatada" porque no partía como favorita pero desde hace semanas había subido en las apuestas.
Troy Kotsur se ha convertido en la segunda persona sorda en ganar este reconocimiento, tras su compañera en este filme Marlee Matlin, que lo logró en 1987 con Hijos de un dios menor. Su discurso fue uno de los más emotivos. "Le dedico este premio a toda la comunidad de sordos", dijo en lenguaje de signos Kotsur tras recibir la estatuilla. "Es increíble estar aquí, como también lo ha sido este viaje que ahora reconoce la Academia", afirmó el actor, quien se mostró sorprendido de que la película haya llegado "a todo el mundo, e incluso a la Casa Blanca".
Jessica Chastain se llevó el premio a la mejor actriz por Los ojos de Tammy Faye dejando sin premio a Penélope Cruz, nominada por Madres paralelas. Tampoco se llevó el premio su esposo Javier Bardem, candidato por Ser los Ricardo en la categoría de mejor actor protagonista. Ni el donostiarra Alberto Iglesias, quien con Madres paralelas había conseguido su cuarta nominación. Un premio al que optó, también sin galardón, por sus trabajos en El jardinero fiel (2005), Cometas en el cielo (2007) y El topo (2011). El premio se conoció antes del inicio de la gala, ya que esta era una de las ocho categorías que la cadena ABC decidió dejar fuera de la retransmisión en directo de la ceremonia. Finalmente, se lo llevó Hans Zimmer por la banda sonora de Dune.
No hubo sorpresa tampoco para el premio a la mejor actriz de reparto, ya que tal y como figuraba en todas las quinielas se lo llevó Ariana Debos por su interpretación en el remake de West Side Story.
La película de ciencia ficción Dune arrasó en las categorías técnicas llevándose los premios a mejor diseño de producción (Patrice Vermette y Zsuzsanna) mejor montaje (Joe Walker), mejor sonido (Mac Ruth, Mark Mangini, Theo Green, Doug Hemphill y Ron Bartlett), mejores efectos visuales (Paul Lambert, Tristan Myles, Brian Connor y Gerd Nefzer), mejor fotografía (Greig Fraser) y mejor banda sonora.
Tal y como estaba también previsto, Drive my car de Ryûsuke Hamaguchi se alzó con el Oscar a la mejor película internacional, Summer of soul se llevó el galardón al mejor documental mientras que Encanto de Disney se llevó el premio a la mejor película de animación.
Los españoles Alberto Mielgo (director) y Leo Sánchez (productor) ganaron el Oscar al mejor cortometraje de Animación con El limpiaparabrisas, una producción que reflexiona sobre el amor. Alberto Mielgo lleva más de 20 años trabajando para el mundo de la animación para plataformas como Disney, Netflix o Sony y ha participado en películas de renombre como La novia cadáver o Harry Potter y las reliquias de la muerte.
Mielgo lleva una década establecido en Los Ángeles, aunque pasa largas temporadas en Madrid, donde tiene su productora, Pinkman, con la que ha rodado El limpiaparabrisas en coproducción con Leo Sánchez Studios.
Mejor película
Mejor dirección
Actriz
Jessica Chastain 'Los ojos de Tammy Faye'
Actor
Actor de reparto
Actriz de reparto
Guion original
Película internacional
Película documental
'Summer of Soul
Película de animación
'Encanto'
Cortometraje de ficción
'The Long Goodbye'
Cortometraje animación
'El limpiaparabrisas'
Corto documental
'The Queen of Basketball'
Montaje
'Dune'
Mejor Música
'Dune'
Sonido
'CODA'
Efectos visuales
'Dune'
Maquillaje
'Los ojos de Tammy Fayer'
Fotografía
'Dune'
Vestuario
'Cruella'
Canción original
'No Time to Die' (Sin tiempo para morir)
Voto del público
'La liga de la justicia de Zack Snyder'
Mejor película popular
'Ejército de los muertos'