- Sus directores, ahora están "muy contentos", pero antes de la noticia estaban "nerviosos". No las tenían todas consigo, no obstante La trinchera infinita, de Jose Mari Goenaga, Jon Garaño y Aitor Arregi está un paso más cerca de competir en la categoría de Mejor película internacional en la 93ª edición de los Premios Óscar, que se celebrarán el próximo 25 de abril. La emoción fue tan grande que en la sede que comparten Irusoin y Moriarti, en el polígono donostiarra de Zuatzu, hubo en la mañana de ayer "gritos, abrazos y bailes".
La Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas del Estado ha seleccionado esta historia sobre un topo que se encerró en su casa durante más de 30 años tras el alzamiento fascista que dio pie a la Guerra Civil. La trinchera infinita se ha impuesto a las otras dos finalistas -en un inicio, hasta 58 filmes optaban a representar al Estado en los galardones de Hollywood-: El hoyo, del bilbaino Galder Gaztelu-Urrutia, y O que arde, coproducción entre Euskadi, Galicia, Francia y Países Bajos dirigida por Oliver Laxe. Dos cintas "de peso", según los cineastas, "con razones para salir elegidas". "Quizás por un sistema defensivo de prepararte para lo peor, durante los últimos días hemos estado pensando que el resto de películas tenían más opciones. Cuando sacan el papelito, esos cinco o seis segundos, para mí son terroríficos", aseguró ayer entre risas Aitor Arregi, en una conversación en la que también participaron Jon Garaño y Jose Mari Goenaga. El trío de cineastas recibió a este diario tras conocer el fallo, para hablar de sus emociones y de lo que queda por delante. Como es lógico, sus teléfonos no dejaron de sonar debido a la expectación que generó la noticia tanto en medios locales como en estatales.
La preselección es, sin duda, una nueva alegría para el equipo, sobre todo, después de que el confinamiento en Francia haya hecho que La trinchera infinita apenas permanezca dos días en cartelera -se estrenó el pasado miércoles-, algo frustrante para los directores, ya que habían experimentado una buena acogida durante el mes y medio anterior en la "gira" por las salas del circuito francés de Arte y Ensayo.
Pese a que la película de Arregi, Goenaga y Garaño aborda un periodo concreto de la historia de España y, sobre todo, de Andalucía, siempre la han defendido como una alegoría de carácter universal. Aún más, con el confinamiento por la pandemia, la cinta ha adquirido "una capa más de lectura"; según Goenaga.
No en vano, el estreno de La trinchera infinita, que en el Zinemaldia de 2019 se hizo con cuatro premios, incluyendo el de Mejor dirección y guion, coincidió a las puertas del primer Estado de Alarma. "En redes vimos que la película se relacionaba con la situación que se estaba viviendo e, incluso, yo hice varias entrevistas con esa cuestión", comentó Goenaga, que luego añadió que entiende que entre los académicos del Estado hay quien ha apostado por su cinta, precisamente, "por esa capa de lectura".
En este sentido, Garaño añadió que durante la gira de presentación por el país vecino, una de las preguntas habituales era saber cómo consideraban los cineastas que había cambiado la percepción hacia la película debido a la reclusión. "Es normal que sea algo que esté en la cabeza de la gente", aseguró. Por otra parte, a su juicio, la preselección ayudará a que la cinta se reestrene con más fuerza en Francia, una vez abran las salas. En el caso de Donostia, desde este mismo viernes podrá disfrutarse de nuevo en los cines Príncipe de Donostia.
Es la segunda vez que Los Moriarti son seleccionados para representar al Estado en la pugna por los galardones más conocidos del séptimo arte. La primera ocasión fue con Loreak, en 2015, mientras que la película Campeones les impidió repetir experiencia con Handia (2017).
Ahora, aseguraron, todo será muy distinto a hace cinco años. Para conseguir la ansiada nominación las películas tienen que hacer campaña, algo que será diferente, debido a que no está previsto que los cineastas puedan viajar a EEUU para la promoción de la cinta debido a la pandemia.
No obstante, los productores de la cinta, Xabier Berzosa y Olmo Figueredo Gonzalez-Quevedo, ya se han reunido con el departamento de Festivals and Awards de Netflix -Festivales y Premios-, encargada de la distribución internacional de la cinta, para abordar la campaña de cara a los Óscar. El primer paso llegará este mismo sábado, cuando la plataforma estrene La trinchera infinita al otro lado del charco. Esto, por supuesto, ayudará en su camino hacia la alfombra roja, aunque sea virtual dado que no se conoce muy bien cómo será la gala. "Que la película esté en Netflix ayudará en la campaña. En definitiva, es una plataforma con acceso a millones de personas y permite que el foco se ponga sobre ti y que la película entre en el juego. Todo cuenta para que la película saque ruido", dijo Arregi.
A sus responsables les queda seguir trabajando con La trinchera infinita, mientras profundizan en otros proyectos que tienen encima de la mesa. Aún más, piensan que esta preselección ayudará a que alguna de esas ideas salga adelante. El 9 de febrero del año que viene la Academia de Hollywood publicará la Shortlist y un mes después, el 15 de marzo, se conocerán todos los candidatos. Por ahora, toca esperar para saber si la cinta vasca obtiene la nominación.
"Con el confinamiento, a 'La trinchera infinita' se le ha añadido una nueva capa de lectura"
Director
"Netflix es una plataforma con acceso a millones de personas, que la película esté la pone en el juego"
Director
"La preselección puede ayudar a que cuando abran los cines en Francia se reestrene con más copias"
Director
