- Carlos Sobera es el elegido por Mediaset para presentar los debates de La isla de las tentaciones. Nada hacía pensar que el presentador vasco caería en manos de los programas más morbosos de la televisión hasta que el 17 de abril de 2016 se pasó al lado oscuro y se puso al frente de First dates. Hasta entonces había sido el divertido conductor de concursos de cultura general con más o menos dificultad.
Al terminar 2015, Carlos Sobera y Atresmedia terminaban una relación que de más de once años y en las que él había probado un buen número de programas y en los que se había metido a los espectadores en el bolsillo. Hace cuatro años y medio paso la primera línea roja y se puso al frente de First datesy se convirtió en un celestino amoroso sentando a la mesa de un peculiar restaurante a las más sorprendentes parejas que buscan una relación sentimental. Tras el éxito en audiencia del formato, sorprendente, pero cierto, la cadena ha ido dejando en sus manos más actuaciones en programas del ramo: Gran hermano vip o Supervivientes.
Un paso más Y ahora ha caído en la tentación más absoluta. Sobera ha ido avanzando y asumiendo las leyes televisivas que marcan los equipos de Vasile, siempre dispuestos a conseguir audiencias a cualquier precio. Por eso en breve se va a sentar en un plató a juzgar cómo son la relaciones de las cinco parejas que van a poner a prueba su fidelidad antes las cámaras y de paso ganar unos cuantos pases bien pagados en los programa de Cuatro y Telecinco. Con esta apuesta cubre el puesto en los debates dejado por Sandra Barneda. La presentadora se ha ido a República Dominicana en sustitución de Mónica Naranjo que sin explicar los motivos ha dejado este reality.
La cadena aún no ha dado fecha de estreno, pero ha aclarado que será un programa muy transversal y que se verán en el grupo, especialmente destaca la interactuación de sus dos canales principales, Cuatro y Telecinco.
Muchos celos Pero ¿quiénes van a ser las cinco parejas en enfrentarse a sus fantasmas y demonios sentimentales? En todas ellas parece que hay un denominador común, los celos. Algo que creen podrán resolver con las suculentas tentaciones humanas que les van a poner delante. Es lo que tiene la televisión, evita los consejero expertos en problemas amorosos y encima pueden ir a un lugar paradisiaco gratis, todo por ser famosos en sus barrios.
Después de muchas especulaciones, se han hecho públicos los nombres. Melyssa y Tom se conocieron en Mujeres, hombres y viceversa. Empezaron una relación hace ocho meses y ahora quieren ponerla a prueba y ver si es tan sólida cómo ellos creen y, sobre todo, superar los celos de ellas que confiesa ponerse como una furia cuando las chicas se acercan a su novio y él las trata bien.
Melodie y Cristian llevan más de nueve años juntos, ambos son camareros y tienen fama de infieles, lo dicen ellos. Cuando se enamoraron parece que no estaban libres, eran las parejas de sus mejores amigos. Así que parece que van a dar mucho juego a Mediaset en el paraíso de las tentaciones que tiene previsto mostrarán a sus espectadores. ¿Comerán de la fruta prohibida? Un tópico, pero no más que el planteamiento del programa.
Los sevillanos Inma y Ángel están dispuestos a poner a prueba una relación que tiene sus mayores problemas en el trabajo de ella. Se considera influencer, algo que a él no le gusta e Inma está muerta de celos. Creen que en el programa podrán resolver sus problemas.
Cuando Mayka y Pablo se conocieron, hace ya tres años, él no deseaba iniciar una relación seria, por lo que se mantuvo abierto a tener citas con otras chicas. "Cuando me enteré me sentí fatal, pero decidí perdonarle", reconoce Mayka. Sin embargo, confiesa que no acaba de superar los celos y de construir una relación basada en la plena confianza. "Por eso he dado el paso de ir a La isla de las tentaciones, para ver realmente con quién estoy".
Por último, están Marta y Lester, la pareja más longeva, once años de relación. "Solemos discutir por todo". Así define Marta, exconcursante de Gran hermano 16, el presente de la larga relación que mantiene con Lester, un vínculo en el que "están bien, mal o muy mal" y que ha vivido ya alguna que otra interrupción.