- La aparición del covid-19 está modificando, aplazando y cancelando la agenda de no pocas propuestas culturales, pero, por fortuna, hay quien, adaptándose a la nueva situación, ha decidido no rendirse. Es el caso del Festival de Teatro de Humor de Araia, que del 14 al 16 de agosto vivirá su vigésimo séptima edición. No solo eso, sino que además el certamen va a llevar a cabo su ya tradicional programación escénica paralela por diferentes puntos del territorio, manteniéndose así fiel a su encuentro con el público, más allá de que la llamada nueva normalidad va a suponer introducir cambios con respecto a entregas anteriores. “Desde la llegada de la pandemia, la vocación fue tratar de hacer todos los esfuerzos para volver a subir una vez más al escenario”, explican desde la organización, algo que se ha conseguido.
Según describen desde el certamen, “habrá como siempre espectáculos de interior y de calle, pero en ambos casos amoldados a las medidas de aforo y distanciamiento”. Todo para ofrecer una “insólita pero igual de ilusionada edición del festival de teatro alavés, que reducirá esta vez su programación y sus cantidades de público, pero que ha luchado en los últimos meses por seguir uniendo, pese a todo, a la sociedad y al arte un verano más”. En breve se anunciará todo el programa y se dará información práctica sobre cómo se llevarán a cabo las representaciones y la venta de entradas. Se está trabajando de manera exhaustiva “para cumplir la normativa y todos los protocolos y medidas vigentes en las fechas del festival, tanto para público como para artistas. Por eso, quizás esta vez nos sentaremos más separados que otras veces, pero será para poder reír juntos”.
Con todo, el evento ya quiere ir calentando motores con tres primeros anuncios sobre su cartel. En lo que respecta a las actuaciones de calle, el festival contará, por ejemplo, con Baldin Bada, montaje ofrecido por Shakti OlaizolaBaldin Bada. Circo, teatro, música y pintura se unen en una propuesta protagonizada por una pintora y un músico que “comparten sus disparates con el público, pintando con los pies, haciendo equilibrios imposibles y cantando en posturas raras, reivindicando con todo ello que todo el mundo tiene el derecho de elegir los colores que le rodean”. Junto al músico Joseba Negro, la artista Shakti Olaizola, que logró por esta pieza el segundo premio en el festival Circada, estará en Araia y también en el circuito por pueblos.
También bajo el techo del cielo estarán Gag Street Boys, que ayer estrenaron en Izarra su primer trabajo, Yes, we art!. Iñigo Salinero y David Gutiérrez, bajo la dirección de Eloi Beato, dan vida a una obra en la que, en clave de humor, se habla tanto de la censura como de la autocensura dentro del mundo de las artes. También aquí distintas disciplinas se dan cita en torno a la creación de la máquina de la cultura.
Además, el cartel de los espectáculos de interior (que se celebrarán en el Arrazpi) conoce desde ayer a su primer protagonista de este año tan particular. Se trata de la también compañía alavesa El Mono Habitado, que acudirá a Araia con ¡Ave, Osos!, una comedia estrenada justo una semana antes del comienzo del estado de alarma. De su mano, el público se encontrará ante una pareja gay que recibe la visita del Espíritu Santo convertido en paloma. Dios quiere traer un nuevo Mesías a la tierra y les ha seleccionado a ellos para tal fin. La pieza está protagonizada por Begoña Martín Treviño, Raúl Camino -autor del texto-, Aitor Pérez y Javier Liñera, todos ellos dirigidos por Rolando San Martín.