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Juanjo Mena dirige el lunes a la OSE en un Principal sin entradas

La agrupación, junto a Vocalia Taldea y el trío Kalakan, propone el programa ‘Planetas’ con obras de Holst y Erkoreka

Juanjo Mena dirige el lunes a la OSE en un Principal sin entradas

Vitoria - La Orquesta Sinfónica de Euskadi ha preparado un nuevo programa de conciertos titulado Planetas. Bajo la dirección del vitoriano Juanjo Mena, el batuta vasco con mayor proyección internacional, los platos fuertes serán la obra homónima de Gustav Holst (Reino Unido, 1874-1934) y Zuhaitz, del compositor Gabriel Erkoreka (Bilbo, 1969).

La serie de conciertos de este programa comenzarán el lunes en el Principal gasteiztarra, que está sin entradas para esta cita desde hace ya varios días. El encuentro se producirá a partir de las 20.00 horas, igual que sucederá en las siguientes jornadas en los recitales que se llevarán a cabo en el Auditorio Baluarte de Pamplona, en el Auditorio Kursaal de Donostia y en el Palacio Euskalduna de Bilbo. En el resto de capitales de Hegoalde todavía quedan pases a disposición de los espectadores.

La obra de Holst incluye sus Himnos corales del Rig Veda y Los Planetas, estrenada en un concierto privado en 1918 y ante el público un año más tarde. Himnos corales del Rig Veda está compuesta por tres partes: Para Varuna (Dios del océano), Para Agni (Dios del fuego) y Canto fúnebre. En cambió, Los Planetas tiene siete fragmentos: Marte: el portador de la guerra; Venus: el portador de la paz; Mercurio: el mensajero alado; Júpiter: el portador de la alegría; Saturno: el portador de la vejez; Urano: el mago y, finalmente, Neptuno: el místico.

En el programa participa un gran elenco de artistas. La parte coral de ambas obras de Holst la defenderá Vocalia Taldea, “un coro que hace un trabajo excepcional, formado solamente por mujeres dirigidas por Basilio Astúlez”, precisó Mena ayer en la presentación que hicieron en la sede de la OSE en Donostia. El coro está compuesto por 57 mujeres de todo Euskal Herria, aunque la mayoría de los integrantes son de Gasteiz. “Desde mi criterio musical, pienso que es un coro para cantar a nivel profesional y es un regalo a la OSE”, aclaró el director.

reestreno en euskadi Por otro lado, Zuhaitz tendrá su estreno en Euskadi. La partitura de Erkoreka fue estrenada en el Auditorio Nacional de Madrid en marzo del año 2016, dirigida también por el propio Mena. “La obra no esconde un fuerte trasfondo ecologista y podría decirse que es un canto, o incluso, un grito en defensa de la naturaleza”, explicó Erkoreka, que añadió que hay hasta un irrintzi “por ahí escondido”. Se compone de tres partes: Primer movimiento; Lento y Tercer movimiento.

Zuhaitz combina la música de la orquesta con el folclore vasco. De la segunda parte se encarga Kalakan, el trío de cantantes y percusionistas de Iparralde formado por Jamixel Bereau, Xan Errotabehere y Bixente Etchegaray. Con instrumentos como la txalaparta, la alboka, la xirula o el cuerno, a veces, improvisan con cierto grado de “libertad” en este proyecto. “Hemos aprendido un lenguaje que desconocíamos hasta ahora y eso, en el futuro, nos influenciará de alguna manera”, explicó Bereau. Incluyó que, al principio, la música de la orquesta no era una de sus favoritas, pero que vio la propuesta como una oportunidad para crecer como ser humano y como músico.

La partitura de Zuhaitz también tiene una relación directa con su propio nombre, ya que refleja un árbol. “De forma simbólica, en realidad el árbol suena, literalmente”, precisó Erkoreka, mientras enseñaba la partitura a los periodistas. La obra incluye dos mundos sonoros diferentes: por un lado, Kalakan proviene de la tradición oral junto a sus instrumentos de madera; por otro, la orquesta interpreta una partitura escrita hasta el último detalle. “A veces, el convencionalismo que está escrito en el mundo de la orquesta cansa y aburre; quisiéramos más libertad”, subrayó Mena.

Según el director, la música está muy lejos de ser algo “sólido” y que no está en cambio continuo. Todos los que asistan a los conciertos podrán experimentar algo libre, fresco y nuevo que se incorpora a una estructura sólida, pero mostrando su flexibilidad para comunicarse. “Si no, no funcionaría el grupo”, esclareció el director del programa.

El concierto, además, no dejará de ser otra magnifica oportunidad para poder disfrutar de la maestría de Mena, Premio Nacional de la Música, en su ciudad natal.