barcelona - El escritor británico Jonathan Coe confesó ayer en Barcelona que cuando conoció los resultados del referéndum sobre el brexit, al día siguiente de haberse celebrado, se sintió “sorprendido, decepcionado y confuso” y empezó a hacerse preguntas sobre qué significa ser inglés en el siglo XXI. Además, se sentó ante el ordenador y comenzó a armar El corazón de Inglaterra (Anagrama), su último título, un viaje coral de más de 500 páginas con el que ha intentado desentrañar lo ocurrido, aunque reconoce: “Todavía no he encontrado la respuesta a qué significa ser inglés hoy”.
El lector conocerá la idiosincrasia de la Gran Bretaña que apostó por salir de la Unión Europea (UE) en junio de 2016, no la cosmopolita Londres o en Escocia, sino la región central del país, entre ríos sinuosos y verdes praderas.
Comentó que, a la vez, es una novela, con su habitual desternillante sentido del humor, que afronta lo que significa hacerse mayor, “qué pasa cuando uno llega a los cincuenta y largos -él nació en 1961-, ¿se es más sabio o se está más confuso?”, se preguntó. Tampoco obvia las relaciones que se establecen entre diferentes generaciones y “la crisis de valores que afecta a muchos países, que en el Reino Unido se ha canalizado en quedarse o no en la UE”.
El único momento luminoso que narra es la inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres, en verano de 2012. “Aunque no estoy muy interesado en el mundo del deporte, esa ceremonia me sacudió, fue todo un espectáculo capaz de expresar la personalidad británica, la apertura y la modernidad del país, un momento, tristemente breve, de gran esperanza y energía para muchos, que se produjo tras los disturbios de 2011”. - Efe