Vitoria - Tras cerrar 2018 con la presencia del coreógrafo, bailarín y artista visual vienés Philipp Gehmacher, el programa danZálava ya mira al nuevo año. De hecho, la próxima semana recibirá a la bailarina y coreógrafa portuguesa Vera Mantero, quien a su paso por Gasteiz ofrecerá tanto su experiencia profesional a través de un curso intensivo que se extenderá del 28 de este mes hasta el 1 de febrero, como una muestra abierta al público en general de su trabajo, lo que tendrá lugar el miércoles 30. Todo ello, de la mano de Altraste Danza, se llevará a cabo en Artium.
En concreto, la cita de los espectadores con quien está considerada como uno de los nombres más destacados de la Nova Dança Portuguesa se producirá a las 20.00 horas, siendo el acceso gratuito hasta completar el aforo. Sin duda, una oportunidad única de acercarse de primera mano al trabajo de una intérprete que, además, propondrá a los asistentes un diálogo posterior para poder intercambiar impresiones.
En lo que se refiere al curso de cinco días, Mantero desarrollará la utilización de la relajación, el uso vocal, la escritura, la respiración y la asociación libre como algunos medios para encontrar movimientos y acciones que existen dentro de uno mismo, explorando algunos de estos medios por separado de forma que los participantes puedan llegar a incorporarlos más tarde en procesos de improvisación más extensos y complejos.
El trabajo artístico de Vera Mantero, como recuerda danZálava, ha sido reconocido con galardones como el Prémio Almada (2002) y el Prémio Gulbenkian Arte por su carrera como creadora e intérprete (2009), así como a través de iniciativas como la retrospectiva organizada por Culturgest en 2009, y la representación portuguesa en la 26 Bienal de Arte de São Paulo (2004) con una obra creada en colaboración con el escultor Rui Chafes, titulada Come your Heart Out.
Tras un 2018 de “consolidación” para danZálava, de mano de Mantero se pone un año en el que se quiere seguir profundizando en objetivos fundamentales para el proyecto como el de que “los profesionales de la danza en Euskadi puedan ejercer como tal sin tener que recurrir a otras opciones de trabajo que les limiten su labor creadora o interpretativa”. En este sentido, “vemos como una necesidad imperiosa el cambio de la percepción de la sociedad en la que vivimos donde la danza contemporánea se percibe como un entretenimiento puntual”.