Vitoria - Si los colectivos que conforman las txosnas trabajan todo el año, no hay razón para que la agrupación en sí sólo se haga visible en las fiestas de La Blanca. Bajo este razonamiento, en este 2019 que acaba de arrancar se van a llevar a cabo una serie de iniciativas puntuales en distintos puntos de la capital alavesa con las que se pretende sumar en diferentes ámbitos, siendo el cultural uno de ellos. De hecho, para comenzar esta línea de trabajo, la comisión que sustenta Gasteizko Txosnak acaba de poner en marcha su primer concurso de grupos de música, una iniciativa cuyo objetivo principal, como ayer expresaron sus responsables en una rueda de prensa llevada a cabo en la sala Jimmy Jazz, pasa por “dar una opción sobre los escenarios a grupos no tan conocidos”.
Así, las formaciones que estén interesadas pueden, desde ya, apuntarse al certamen a través de www.gasteizkotxosnak.org. En esta página encontrarán, hasta el 8 de marzo, el formulario de inscripción, al que tendrán que adjuntar cinco canciones, tres de ellas, por lo menos, en euskera. A partir de ahí, del 15 al 21 de marzo, se anunciarán los 10 grupos que pasen el penúltimo corte.
De esa decena de nombres saldrán los cinco finalistas del concurso. Uno de ellos se elegirán mediante votación popular, los otros de la decisión del jurado que se creará para tal fin. Eso sí, de estas cuatro bandas, una por lo menos tendrá que ser alavesa y otra tendrá que contar entre sus filas con presencia femenina. Estos, eso sí, son los mínimos. Estas formaciones, aunque todavía no hay fecha concreta, actuarán en la sala Jimmy Jazz, para intentar ganarse en directo a quienes tengan que tomar la decisión final. De ahí, se elegirá a un ganador que, por un lado, obtendrá un premio en metálico de 500 euros y, por otro, se le dará la opción de poder actuar en el recinto de las txosnas durante las fiestas de este año.
A partir de aquí, ahora es el turno de los músicos que puedan estar interesados en tomar parte en una apuesta que quiere aportar su grano de arena para visibilizar a quienes no tienen tantas oportunidades de dar a conocer su música, más allá de que la convocatoria, en un principio, no pone límites en cuanto a estilos se refiere, ni tampoco establece categorías en este sentido.