Vitoria - Su último paso por tierras alavesas se produjo con la calle como escenario dentro de la programación del Festival de Teatro de Humor de Araia. Mañana, Ganso & Cia regresa, en esta ocasión para situarse bajo el techo del Principal gasteiztarra. Lo hace para representar Kaput, obra con la que el grupo de Durango obtuvo el año pasado el Premio a la Mejor Interpretación en la Feria Europea de Artes Escénicas para Niños y Niñas de Gijón (Feten).
Como es habitual en el ciclo familiar del Festival Internacional de Teatro de Vitoria, el encuentro con el público se producirá a partir de las 18.00 horas, quedando todavía algunas entradas disponibles en el centenario edificio de la calle San Prudencio al precio de 6 euros cada una. A partir de ahí, las miradas se centrarán en el trabajo de Gorka Ganso, acompañado de nuevo por Txefo Rodríguez. Bajo la dirección de Jimena Cavalletti, la obra “nos cuenta la huida inmóvil de dos chiflados y un coche, dos compañeros de viaje que acogeremos en nuestro refugio para darles un rato de calma y esperanza”, según explica el grupo.
Recomendada para espectadores a partir de cinco años, la obra, que cuenta con música de Carlos Herrero, busca ser “una comedia emotiva, abrasiva y disparatada que nos acerca al drama universal de las guerras y sus efectos secundarios desde la risa y el optimismo. Un viaje sin palabras capaz de divertir y conmover a todos los públicos”.
A partir de ahí, los más jóvenes que todavía no conozcan la marca de la casa de Ganso & Cia se dejarán atrapar por el lenguaje propio que, sin usar la palabra, ha creado en los últimos años un proyecto que tanto en sala como en calle está obteniendo diferentes reconocimientos. Tanto dentro del País Vasco como en el resto del Estado y, sin olvidar otros países, sobre todo Francia y Portugal, el proyecto lleva tiempo cimentando un nombre propio en base al clown, a la expresión con el gesto, al juego con la música, al humor y a la cercanía. Así lo volverá a demostrar mañana dentro de un ciclo familiar que tras abrirse hace una semana de la mano de Mummenschanz llega ahora a su ecuador. Un punto medio que compartir con el público y dos personajes y un coche que viajan sin moverse.