Rabat - La compañía suiza Nestlé ha creado un concurso que ha suscitado la polémica en las redes sociales, consistente en elegir a la mejor esposa entre un grupo de candidatas que se presentan para hacer el mejor postre. El concurso, titulado Me quiero casar, promete cinco capítulos, de los que el primero reproduce todos los estereotipos de las escenas más tradicionales de un casamiento en Marruecos. Una madre que quiere desposar a su hijo convoca por internet a las candidatas y hace una primera criba: las cinco elegidas son convocadas a su domicilio y les impone el primer reto: un mandil, a la cocina y a preparar un postre a base de la famosa leche condensada de la marca suiza. Las candidatas, todas de aspecto moderno (ninguna lleva el velo, por ejemplo) no ponen pegas a esta primera misión en la cocina, en la que entre batidoras, hornos, harina y azúcar comienzan a surgir las típicas tensiones de los concursos televisivos.
la versión de la marca Aunque la polémica no ha hecho más que empezar, se conoce la versión de Nestlé: “Se trata de hacer recetas con conceptos que no sean monótonos, una publicidad que no sea la clásica”, escribió en una red social, Salma Myar, la brand manager de la marca, ella misma una joven mujer moderna. Y añade Myar con ingenuidad o descaro: “Es cierto, es un tema de debate y divertido también, hemos elegido tratarlo de forma verdaderamente estereotipada, que puede interpretarse de distintas maneras”. La campaña Me quiero casar tiene todavía cuatro capítulos pendientes, durante otras tantas semanas, pero recuerda ya a aquel polémico tutorial de maquillaje de la cadena pública 2M destinado a las mujeres que quieran eliminar de su rostro las huellas del maltrato machista. Aquel tutorial provocó una polémica internacional y obligó a la cadena a pedir disculpas públicas.
Un estudio realizado en Marruecos por ONU Mujeres reveló que el 69% de los hombres encuestados afirman que son ellos los que deciden cuándo su esposa puede salir de casa y que el 91 % desea saber en todo momento dónde se encuentra su cónyuge. Además, el 38 % de los varones (y el 20% de las mujeres) opina que la esposa “a veces merece ser golpeada”. - Efe