madrid - Verónica Echegui y Gael García Bernal viven una relación marcada por la obsesión y la dependencia en Me estás matando Susana, una comedia romántica dirigida por el mexicano Roberto Sneider que pone sobre la mesa el tema del machismo y que llega mañana a los cines españoles.

Basada en la novela Ciudades desiertas, de José Agustín, la película cuenta la historia de Eligio, un actor que vive de fiesta en fiesta y que emprende un viaje para recuperar a su novia, aspirante a escritora, que lo abandona un día sin dar explicaciones. “Él es un macho cabrío y ella en lugar de ponerle un límite, huye”, describe la actriz, que considera positivo que el debate sobre el machismo esté más de actualidad que nunca, aunque “no hemos avanzado tanto como creemos” al respecto. “Ha saltado la alarma, pero es una cuestión de base, nuestros sistemas educativos son muy pobres y la educación emocional no forma parte de la enseñanza pública, quizá porque no conviene”, reflexiona Echegui (Madrid, 1983), que alcanzó la fama con el personaje de La Juani. Preguntada por la fuerza relativa con que ha llegado a España la onda expansiva de la campaña contra el acoso sexual emprendida en Hollywood a raíz del caso Weinstein, Echegui ve positivo que se haya iniciado un movimiento en el que se da espacio a las víctimas para poder hablar sin sentirse repudiadas. “Eso es vital, pero es cierto que aquí no han salido nombres en casos de acoso grave. Si yo hubiera sido víctima de algo así, lo habría denunciado, pero no me ha pasado. Solo una vez un productor me tocó el culo y le monté tal pollo delante de todo el mundo que el tipo se quedó avergonzado”, relata.

Como su personaje en Me estás matando Susana, Echegui varias veces en su vida lo ha dejado todo para marcharse a otro lugar. “Con 21 años me fui a México y con 24, después de El patio de mi cárcel, me fui a Inglaterra a trabajar de camarera, estaba un poco superada, necesitaba hacer otra cosa, pasé allí cinco meses y luego me ofrecieron hacer Verbo y volví”, cuenta. En su opinión, ese tipo de “huidas” sirven para ver qué es lo que no está funcionando en tu vida. “Por mucho que te vayas a la otra punta del mundo, si tienes problemas van a estar ahí cuando vuelvas, pero es bueno tomar perspectiva y entender qué esta fallando”, considera. - M. Tsanis