buenos aires - En los momentos de tensión política que vive su país por el conflicto catalán, y ante las apocalípticas voces que auguran un escenario prebélico, la escritora española Almudena Grandes afirma que “la España actual no se parece para nada a la del 36”.
En una entrevista con motivo de la presentación en Argentina de su duodécima novela, Los pacientes del doctor García (Tusquets), cuarta del ciclo dedicado a las consecuencias de la Guerra Civil (1936-1939), la también articulista niega que haya similitudes con aquella España en llamas. “Yo viví el franquismo y nada de lo que está pasando tiene que ver con eso. Hay cierta fantasía bélica por parte de mucha gente. Pero me parece una ingenuidad y una tontería. Riesgo real no ha habido en absoluto”, afirma.
Acostumbrada a ser cuestionada sobre cualquier asunto, Grandes, nacida en Madrid en 1960, no elude hablar sobre el conflicto político que mantiene en vilo a España y que considera llegará a su fin si en las elecciones convocadas en Cataluña por el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, para el 21 de diciembre, se forma un Gobierno no independentista.
La novelista tiene claro que Rajoy “ha jugado mucho mejor al ajedrez” que los independentistas y que “ha sido el ganador” porque, entre otros motivos, el cesado presidente del Gobierno regional catalán, Carles Puigdemont, “se lo ha permitido, porque si Puigdemont hubiera convocado elecciones 24 horas antes de declarar la independencia, quizá la partida habría acabado en tablas”.
Autodeclarada “francotiradora” en el conflicto catalán al no estar de acuerdo con ninguno de los partidos, la novelista, que durante años estuvo ligada a la coalición progresista Izquierda Unida, considera que Rajoy “no pudo impedir” el referéndum independentista ilegal del 1 de octubre “porque había millones de catalanes que querían votar”. Pero también considera que Puigdemont “o el que sea” no va a gobernar en una Cataluña independiente “porque hay millones de catalanes que no quieren vivir” separados de España. Convencida de que los independentistas hicieron en general una “campaña de propaganda excelente” pero jugaron “muy mal al ajedrez” al haberse creído su “propaganda”, Grandes opina que Rajoy fue culpable de “no tomárselos en serio” y de no ser capaz de crear un “relato alternativo a ese esfuerzo propagandístico catalán”. “Pero pase lo que pase, habrá una parte de la sociedad catalana que se ha ido, y eso es muy peligroso porque sabemos cómo ha empezado pero no cómo puede terminar”, dice la novelista. Sobre el manido maltrato a Cataluña, Grandes no tiene reparo en decir que, aunque le cueste “un disgusto”, España no ha maltratado a dicha comunidad autónoma “más que a las regiones pobres”, donde la gente ha vivido “muy mal”, como Andalucía, Extremadura, Asturias o Castilla-La Mancha. Los desprecios que se han infligido a la lengua catalana, la falta de respeto por la cultura catalana son lamentables, no sé si son tan graves como el estado de pobreza permanente y de olvido y abandono en el que han permanecido otras regiones”, opina.- Efe