Vitoria - Crear una identidad desde la nada, convertirla en real e interactuar con la sociedad. A grandes rasgos, ahí se encuentra el fundamento del proyecto Futuro perfecto, una suma de experimentos artísticos y sociales desarrollados por la creadora Edurne Herrán a lo largo de dos años y medio, aunque en el caso de alguna de las propuestas, ésta todavía sigue abierta. “Creo que es la cosa más marciana que he hecho en mi vida”, dice con una sonrisa la autora.
Es Montehermoso el lugar en el que poder encontrarse hasta el 9 de abril con el testimonio escrito y visual de estos laboratorios sobre la identidad, trabajos que iniciaron con la construcción, en primer lugar, “de mi gemela”. De hecha se inventó todo para adoptar su personalidad y experiencia. Entre las dos empezaron a mandar currículums a las mismas ofertas de trabajo para ver cuáles eran las respuestas. “Todavía los seguimos enviando”.
Pero eso fue sólo el comienzo. Después se decidió a generar once personas distintas, “yoes que han tenido su vida real”, remarca Herrán. Todas ellas han acudido a servicios de videncia para ver qué supuestas lecturas del futuro obtenían, conversaciones transcritas y puestas a disposición del público en el centro cultural de lo alto de la colina. “Hubo alguien que sí se dio cuenta de que era la misma persona que había estado otro día, pero no el resto”, recuerda la artista.
Para completar esas investigaciones, sus personalidades -cuya generación ha supuesto un importante trabajo de documentación- intentaron ligar en cuatro países europeos diferentes a través de una conocida aplicación especializada en estos menesteres en la que se crearon once cuentas falsas.
Todo ello se va relatando en una exposición que se completa con un área de documentación en la que poder profundizar más tanto en el proceso como en las cuestiones relacionadas con la construcción de la identidad. Herrán, de hecho, hace referencia a esa teoría científica que explica que el cerebro humano define 11 aspectos sobre las personas en los primeros 3 a 7 segundos de la primera impresión. Al mismo tiempo, pone el acento en la influencia de los otros a la hora de definirse y modificarse, sin olvidar el peso de otros factores, como el tecnológico. “En general, los resultados que he obtenido están bastante acordes con las premisas iniciales, aunque también me he llevado alguna sorpresa”, describe sobre un proyecto que ella misma recomienda de manera especial para los adolescentes.
La idea, eso sí, no se queda solo en las paredes del centro cultural. También se va a traducir en visitas guiadas, en un taller y en el ciclo de cine Dobles imaginarios, que proyectará Las tres caras de Eva (el 28 de este mes), Yo, yo mismo e Irene (7 de marzo), Cisne negro (21) y Dr. Jekyll y Mr. Hyde (28). “Y después de todo esto no me he vuelto loca”, ríe la artista, que con esta idea vuelve a exponer en una capital alavesa que conoce a la perfección puesto que en ella ha residido.
Tras la muestra Fail again, fail better que Gert Voor in’t Holt realizó en septiembre del año pasado, la de Herrán es la segunda de las tres presentaciones que Montehermoso está acogiendo para dar a conocer los tres proyectos artísticos que apoyó en la perceptiva convocatoria de 2016. El camino se completará a partir del 14 de marzo de la mano de Miriam Isasi y su Doppler eco tac. Según la concejal de Cultura, Estíbaliz Canto, en breve se presentarán las bases para la edición de 2017 de estas ayudas, que sumarán una línea específica para el audiovisual.