Vitoria - Abrir el escenario a los jóvenes. Poner en valor a los intérpretes locales. Contar con la aportación de músicos reseñables llegados de lejos. En pocas palabras, sobre estos tres pilares nació el ciclo de cámara del Conservatorio Jesús Guridi, una apuesta que mañana inaugura su sexta edición. Un total de siete conciertos se irán sucediendo hasta octubre, cuando el broche lo ponga el contratenor vitoriano Carlos Mena, quien, por cierto, hace unos días comenzó su trabajo con el Centro Nacional de Difusión Musical en calidad de artista residente.

Como en ocasiones anteriores, las citas con el público se producirán en el aula magna del conservatorio a las 19.30 horas. A la venta ya está el abono para todas las actuaciones a un precio de 25 euros cada pase. Además, por 5 euros se podrá conseguir la entrada para cada uno de los recitales, si bien el ciclo mantiene la costumbre de que el acceso sea gratuito para estudiantes y personas en situación de desempleo. “Con el paso de los años notamos un incremento en la presencia de espectadores y es lo que esperamos seguir cimentando”, apuntó ayer el director del Jesús Guridi, Carlos Seco, en la presentación del programa.

La primera parada se producirá mañana de la mano de Urval Ensemble, cuarteto de clarinetes que nació con la intención de promocionar la música vasca dentro y fuera de las fronteras de Euskal Herria. “Sin duda, su propuesta no es nada habitual por el hecho de tratarse de cuatro clarinetes”, apuntó Seco sobre este concierto inaugural de un ciclo que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Gasteiz, el patrocinio de Laboral Kutxa y la colaboración de DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA.

Ya el 9 de marzo, el turno será para el violinista Carlos Parra y el pianista Jon Bolois, dos intérpretes que conocen bien las paredes del conservatorio de la capital alavesa pues entre ellas han hecho parte de su formación y, en el segundo caso, de su carrera profesional. En una costumbre para el ciclo parece convertirse lo que sucederá el día 6 de abril. La voz ha ido ganado espacio en el programa, algo que en esta ocasión correrá a cargo de Dzast Ahotsak, coro dirigido por Javier Sagastume que el año pasado celebró su primera década de existencia, una década en la que la agrupación ha puesto su mirada siempre en repertorios nada habituales.

Esa relación entre músicos de dentro y fuera de Álava tendrá otro ejemplo claro en lo que sucederá el 4 de mayo, cuando sobre las tablas se unirán el órgano de Aitor Olea y la trompeta de David Salomón Jarquin, joven nicaragüense que en pocos años ha conseguido atesorar no pocos reconocimientos. Antes de tomarse un pequeño respiro por la llegada de la época estival, el ciclo acogerá el 15 de junio a la guitarra de Unai Insausti Eguia y a la flauta de Carmen Martínez Guerra, que también estará como en casa en el Jesús Guridi.

En octubre llegarán los dos últimos recitales previstos. Por un lado, el 5 será el turno para el Dúo Cassadó, formado por el violoncellista Damián Martínez Marco y la pianista Marta Moll de Alba. El 19 llegará el gran broche junto a la pianista Susana García de Salazar y el mencionado Carlos Mena, que hará un esfuerzo con respecto a su caché para participar en el ciclo puesto que “quiere apoyar al programa y sus valores”, admitió Seco.