madrid - La acción instintiva, el olor a pintura fresca, la intimidad de las sombras y la emoción de atravesar las fronteras de lo legal se dan cita en Guerreros urbanos, un libro de fotografías de Jeosm, con textos de Arturo Pérez-Reverte, resultado de 4 años acompañando a grafiteros. “Si es legal, no es grafiti” es la máxima que, según cuenta Jeosm (Talavera de la Reina, 1982), sostiene Reverte para definir a estos “guerreros”, que al escritor le recordaban a “los comandos” de conflictos bélicos que han formado parte de su trayectoria periodística. Como consecuencia de ese interés, el escritor publicó El francotirador paciente (2013), en el que colaboró también Jeosm. Y ahora es el manchego quien, a propuesta de Reverte, publica este relato fotográfico sobre “el proceso creador” de los grafiteros, despiertos mientras los demás duermen; sobre la resistencia convertida en arte y acción callejera.

Guerreros urbanos (Alfaguara/La Fábrica), que acaba de ser publicado, es un diario de 127 páginas y otras tantas imágenes que plasman cuatro años de salidas nocturnas por distintas ciudades europeas con estos protagonistas, entre los que destaca “la camaradería” y “su organización casi militar”, describe el autor. “Contar lo que nunca se cuenta. Una manera de vivir”, ese es el propósito del libro, relata Jesom, que aprovecha para “huir” del estereotipo y exhibir sus fotografías con los colores de la noche, blanco y negro, para “transmitir más y enseñar menos”. Aunque se define como fotógrafo y vive de ello (trabaja para marcas como Adidas, Sony o el Real Madrid), el talaverano posee una experiencia de 20 años en el mundo del grafiti, que le ha valido para saber “manejar los códigos”: cuándo correr, cuándo esperar, los encontronazos con vigilantes del metro o la Policía... Todo por vivir y estar en “el momento” exacto en el que tomar la instantánea. “El grafiti no lo concibo como arte”, explica, y diferencia esta expresión en pintura, “cuya motivación es escribir tu firma”, del arte urbano “que busca transmitir una idea o un mensaje, como Banksy”. - Efe