Madrid - Camilo José Cela Conde, hijo del autor de La Colmena, vuelve a abordar la figura de su padre en Cela, piel adentro (Destino), para recuperar una faceta “desconocida” del Premio Nobel: la del escritor que “grita socorro y está solo y desesperado”.
Hace unos años, Cela Conde recibió de su madre, Rosario Conde, una caja “con una sorpresa bárbara”, miles de cartas y documentos, y “había que esperar para leerlas, porque haberlo hecho con mis padres en vida hubiera sido una grosería”. Entre esos documentos estaban una correspondencia entre Cela y Conde, en la que aparecía un Cela distinto a la imagen que se tenía de él. “Era un joven angustiado y cargado de contradicciones, que cambiaba la percepción que todos teníamos de él”, resaltó ayer Cela Conde. Este descubrimiento obligó a su hijo a considerar que su primer libro sobre el escritor gallego, Cela, mi padre, era “un fracaso”. La versión del Nobel en el imaginario colectivo es la de alguien “tremendo y que algunos podrían pensar que hasta desayunaba niños crudos”. “Todos los escritores se inventan personajes y, el primero, el suyo propio”, reconoció su hijo, que, además, apunta a que en los últimos años de su vida “trató de huir de esa figura inventada”. - Efe