Aunque las letras están mirando ahora a la celebración del Día del Libro -el próximo sábado 23- y todo lo que ello conlleva, sin olvidar que en este 2016 la creación literaria viene mediatizada por aniversarios como los de Cervantes y Shakespeare, el festival Poetas en Mayo tiene los ojos puestos en el 2 del próximo mes, un lunes en el que pondrá en marcha, tanto en Gasteiz como en otros puntos del territorio alavés, un intenso programa de propuestas de todo tipo y condición. Será hasta el sábado 28, cuando la cuarta edición del certamen llegue a su final después de haber realizado medio centenar de recitales, actuaciones, presentaciones... gracias a la implicación de más de 400 personas, creadores en su mayoría locales aunque también procedentes de otros puntos del Estado y de otros países.

La intención, como en los años precedentes, es clara: poner en valor al verso. Pero hacerlo desde la demostración de que, más allá de prejuicios que nacen del desconocimiento, la poesía habla del ser humano y de lo que le rodea, es decir, de cuestiones que aluden al pensamiento y sentimiento de cualquier persona. Por eso es un género que puede ser profundo, cómico, introspectivo, social, erótico, reflexivo, contestatario, dulce, visual... al mismo tiempo.

De hecho, el programa que presenta Poetas en Mayo responde a esa infinidad de caras uniendo a la poesía con otras disciplinas artísticas y compartiendo su camino con públicos de todas las edades y condiciones, ya se llenen las citas propuestas (como ha sucedido en no pocas ocasiones en las ediciones anteriores) o haya menos de los esperados (la minoría también tiene su fuerza).

En Gasteiz, la Casa de Cultura Ignacio Aldecoa, la Sala y el Aula Fundación Vital, Jakintza, Villa Suso, el Canciller Ayala, la Casa del Cordón, el Extitxu, el Campus de Álava, el Museo de los Faroles, Oihaneder Euskararen Etxea, el Semillero municipal de Empresas, el Puerta Grande, la Muralla, el Andén, el Aula Luis de Ajuria, la Fundación Sancho el Sabio, Artium, Taberna Sonora, Eskoriatza-Eskibel, las huertas del convento de las Brígidas, la Virgen Blanca, el antiguo Hotel Pallarés, el Bilibio, el tranvía y, por supuesto, los caños del Casco serán los escenarios elegidos. En el territorio, el festival estará también en Amurrio (por segundo año consecutivo), Laguardia, Agurain, Maeztu, Salinas de Añana y Trokoniz, lugar en el que el 28 de mayo se producirá el último acto de este año.

Dentro del amplio programa diseñado bajo la dirección de la escritora, entre otras facetas, Elisa Rueda, habrá actos que repetirán formulación, que no resultado puesto que los protagonistas y los momentos serán diferentes. Pero también novedades, como los desayunos poéticos servidor por la actriz Carmen San Esteban, por poner un ejemplo.

Exposiciones, mesas redondas, kalejiras poéticas a ritmo de rap, performances, dibupotes, presentaciones de libros... darán vida a un encuentro capaz de encontrarse con el público en un portal o de reunir a más de un centenar de escolares de Ramón Bajo para hacer un recital en la Muralla.

Claro que además de músicos, bailarines, actores, editores, rapsodas... serán necesarios los poetas, los verdaderos protagonistas. Por ejemplo, esos escritores voluntarios que recorrerán centros escolares del territorio para compartir el hecho literario con los estudiantes. O esos autores como el sirio, ahora residente en Estados Unidos, Firas Sulaiman y la chilena Libertad Manque que acudirán a Álava para compartir su manera de hacer, entender y transmitir. O...

A algunos les sorprenderá, aunque no debiera, encontrarse con algunos nombres más conocidos por otras facetas artísticas que por la poesía. Sucederá así el 12 de mayo en el Aula Fundación Vital, que recibirá al músico, pintor y escritor Luis Eduardo Aute, que presentará su trabajo Animalhada. No mucho después, el 18 en la Casa de Cultura Ignacio Aldecoa, será Pepe Viyuela el que deje a un lado la interpretación y otros de sus intereses para mostrarse como el poeta que es y que cuenta con no pocos seguidores, por cierto.

De todas formas, se buscan públicos diferente para actividades distintas, y aunque habrá jornadas con no pocas opciones, se ha procurado que no haya coincidencia de horas para facilitar lo más posible al público la organización de su propia agenda. Además, la poesía se mostrará incluso en escaparates de la capital alavesa ya que una treintena de establecimientos tomarán parte en el evento como contenedores de versos. De momento, eso sí, habrá que esperar hasta el próximo 2 de mayo y a que la cuarta edición de esta propuesta se ponga en marcha.