BARCELONA - El cineasta alemán Wim Wenders, que estrena en el Estado su última película, Todo saldrá bien, explica que en este filme “la culpa y el perdón sólo eran el punto de partida para llegar al tema principal de la historia, la curación” del protagonista que interpreta James Franco. Rodada en 3D, la película narra la vida del escritor Tomas Eldan (Franco), cuya vida cambia el día que, tras una acalorada discusión con su novia, atropella a un niño; y doce años después sigue culpándose sin poder olvidar aquella tragedia que también afectó a Kate (Charlotte Gainsbourg), la madre del niño, y a todos los que le rodean.

Wenders entiende que la película trata sobre “cómo se pueden curar las heridas profundas y los traumas, y para ello se tenía que trabajar sobre la culpa y el perdón”. Además, el filme se enmarca en el género documental, una decisión tomada en los últimos años y que está relacionada con el contenido, ya que “el cine narrativo en todo el mundo tiene la tendencia a centrar el foco en la fantasía y a alejarse cada vez más de la vida misma”. - Jose Oliva