Buenos Aires. Si las americanas multicolor de Angela Merkel han sido objeto de burla desde hace años, el mundo del vestuario de las mujeres dedicadas a la política encontró una nueva burla con los leggins de la presidenta de Argentina, Cristina Fernández.
La imagen de la mandataria luciendo unos juveniles leggins durante un acto político revolucionó las redes sociales, en especial Twitter. Sin abandonar el luto que no se ha quitado desde el fallecimiento de sus esposo, el expresidente Néstor Kirchner, en 2010, la mandataria eligió unos ajustados leggins, muy de moda actualmente entre las jóvenes, que combinó con una blusa a la cadera, unos zapatos de tacón alto y un collar de perlas.
El look casi primaveral de Fernández saltó pronto a las redes sociales y generó un debate sobre el acierto o no en la elección de la presidenta. Bajo las etiquetas #KirchnerismoEnCalza o #CalzasForever los internautas se manifiestan a favor o en contra.
"Me disculpan, ya quisiera tener la edad CFK y tener ese cuerpo. Le quedan muy bien", dijo una tuitera. "No se me ocurre nada más bananero que una presidenta en calzas", señaló otro.
La propia mandataria reaccionó en su cuenta en la red social, en la que además adjunta un fotomontaje en el que aparece en leggins y con una corona de reina en la cabeza. "El revuelo que causaron mis calzas black!!! cuando me vean con las yellow puestas más de uno le agarra un infarto...", escribió la presidenta de Argentina.
Días después, los periódicos de su país La Nación y Clarín se hacían eco del clamor popular, destacando las "calzas" que llevó en el acto político. Así, la presidenta debió responder de nuevo a los comentarios, esta vez por que los periódicos no dieran importancia al proyecto que su Gobierno estaba presentando y sí a los leggins: "Otra vez Nación y Clarín, más impresentables que nunca. Ahora las calzas. Antes que me ponía ropa de marca. Ahora calzas y el protocolo". Fernández se refiere a la recuperación del Centro de Recreación en los bosques de Ezeiza, en la provincia de Buenos Aires, que califica de "formidable reconstrucción de un icono del Peronismo". "Como verás, al desánimo, la mentira y el ocultamiento, le agregaron la pavada, por no decir otra cosa. Calzas y risas. No está nada mal. Vade retro estupidez", dijo la presidenta en otros tuits.
De hecho, el Gobierno de Fernández está en constante enfrentamiento con La Nación y Clarín, en especial con este segundo, con el que mantiene un litigio por la Ley de Medios.
