Vitoria. Pintan bastos para Artium de cara a 2013, sumándose a los recortes y ajustes que el museo ha tenido que ir realizando en sus cuentas desde 2008. Pero el centro quiere mantener la relación con el público y la cultura partiendo de hacer menos pero con más calidad. Así lo expresó ayer su director, Daniel Castillejo, en su acostumbrada comparecencia de finales de año junto a la diputada de Cultura, Iciar Lamarain, para dar cuenta de los temas acordados en la última reunión del patronato, que se produjo el pasado día 12 aunque no fue hasta ayer cuando se dieron explicaciones. En lo laboral y en lo económico no hay novedades. La tramitación del Expediente de Regulación de Empleo sigue sus trámites legales tras ser ratificado de nuevo por unanimidad en el encuentro de los patronos, una cita que también sirvió para certificar algo ya sabido, que el espacio contará con 3,3 millones de euros, es decir, un 25% menos que este año, y que volverá a estar sin posibilidad de comprar obras para sus fondos.

"La programación que se ha previsto para 2013 se ha hecho acorde con la situación actual y con el ERE", apuntó Lamarain. Un planteamiento que pasa por realizar dos exposiciones menos que en 2012 y por reducir "la intensidad" de las actividades paralelas, buscando mantener la mayoría de programas, sobre todo los consolidados. "Tenemos que adaptarnos a las circunstancias primando la calidad frente a la cantidad", remarcó Castillejo.

Eso se hará tras cerrar un 2012 en el que el museo ha cumplido diez años de vida, una efeméride que no se ha celebrado del todo como estaba planeado al principio (aquí también la crisis se ha dejado notar) pero que ha servido para que el número de visitantes vuelva a los niveles alcanzados en 2008 y 2009. Así, unos 103.000 espectadores (los obtenidos hasta ahora y los que se prevén para la próxima semana) van a pasar en estos doce meses por el museo, lo que supone un incremento de un 10% con respecto a 2011. Este aumento en el número de visitantes se ha concentrado en el público alavés, que alcanza el 44% del total de espectadores, seis puntos más que en 2011. Si se suman los visitantes de Bizkaia y Gipuzkoa, el 55% del total procede del País Vasco. Los visitantes extranjeros se mantienen en un 14% del total (llegados en especial de Francia e Italia), mientras que el peso de los procedentes de otras comunidades se queda en un 25%. Madrid, Cataluña y Castilla son las principales puntos de origen.

Programación Pero dejando a un lado lo que ya es pasado y los números que marcarán el camino durante los doce próximos meses, Artium acogerá en 2013 cinco grandes exposiciones con las que intentar mantener la conexión con lo local y lo internacional, según indicaron Lamarain y Castillejo.

Por orden cronológico, la primera en hacer acto de presencia en el museo será la artista serbia Katarina Zdjelar y su proyecto Of more than one voice. En realidad, esta propuesta ya ha tenido un anticipo en el centro puesto que hace unos meses se realizaron aquí parte de las grabaciones que se utilizarán en la muestra. Y es que la creadora, muy interesada en el lenguaje, ha centrado este trabajo en el rock radikal vasco y en cómo aquellas personas que no conocían el euskera sí se sabían de memoria un buen número de canciones.

Zdjelar, nacida en Serbia en 1979 y residente en Rotterdam, ha protagonizado exposiciones individuales en Alemania, Eslovenia, Holanda, Francia, Reino Unido y Portugal y en 2009 formó parte de la representación de su país de origen en la Bienal de Venecia. Varios de sus vídeos se han proyectado dentro del programa The Silent University en la Tate Modern.

Tras ella será el momento de otro nombre propio, además con firma alavesa, Iñaki Larrimbe. Feria será una propuesta en la que el artista ahondará en una temática que viene trabajando en los últimos años, el llamado turismo cultural. Eso se visualizará en esta ocasión en una serie de instalaciones y experiencias en las que el público también podrá tener un papel activo.

El también colaborador de DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, es un creador multidisciplinar que desarrolla su labor en distintos ámbitos y que cuenta también con una larga trayectoria en otros campos del arte, como su coordinación del Espacio Zuloa o del congreso anual Inmersiones.

En clave colectiva llegará también en primavera No tocar, por favor, un proyecto colectivo comisariado por Jorge Luis Marzo en el que participarán Joan Fontcuberta, Andrés Hispano, Félix Pérez Hita, Mireia Saladrigues, Guillermo Trujillano y el también alavés Arturo Fito Rodríguez. La idea pasa por reflexionar sobre cómo los mecanismos de autoridad y disciplina de los museos condicionan la relación del público con las obras de arte, intentando que el espectador sea consciente de las condiciones especiales que éste asume al contemplar un objeto cuya presencia en un museo le confiere un carácter artístico, y, en última instancia, dotarle de argumentos para mostrarse crítico frente a la autoridad del espacio.

Con la mirada puesta ya en otoño, el centro presentará otras dos exposiciones a partir de octubre. La primera de ellas será Violencia invisible, una coproducción internacional con el Museo de Arte Contemporáneo de Belgrado (Serbia) y The Model de Sligo (Irlanda). A partir de los trabajos de artistas vascos, serbios e irlandeses, y desde el análisis de las historias socio-económicas de estas tres regiones, el proyecto explorará diferentes capas de violencia que, por cotidianas, resultan invisibles en el ámbito de lo doméstico, de lo visual, de la publicidad y de los medios de comunicación.

La segunda muestra será una nueva revisión de los fondos de la colección. Bajo el título de Tesoro Público y comisariada por el artista y profesor Juan Luis Moraza, la exposición abordará la figura del museo como espacio para la protección de un patrimonio común.

Además, Artium seguirá desarrollando programas como Praxis (para la realización a la vista del público, e incluso con su colaboración de diferentes proyectos artísticos) y pondrá en marcha otras como Mutatis mutandi, con la que el museo pretende activar sus espacios exteriores mediante una serie de micro-proyectos artísticos que se desarrollarán todo el año.