Los Ángeles. Ya han pasado 45 años desde la última vez que Cary Grant se plantó frente a las cámaras para irradiar su legendario encanto. Es posible que la comedia romántica Apartamento para tres (1966) haya caído en el olvido, pero su fama de caballero de la época dorada de Hollywood sigue vigente. Hoy se cumple el 25 aniversario de la muerte de este actor, nacido en Reino Unido, que murió en 1986 a los 82 años tras un ataque de apoplejía. Sus romances en la pantalla grande con estrellas como Marlene Dietrich (La Venus rubia), Ingrid Bergman (Encadenados), Grace Kelly (Atrapa a un ladrón), Sofía Loren (Orgullo y pasión) y Audrey Hepburn (Charada) han pasado a la historia por mostrar las mejores escenas de amor de Hollywood. La única hija de Grant, Jennifer Grant, de 45 años, también está fascinada con su famoso padre. "De acuerdo, estaba enamorada de mi padre", escribe en su autobiografía Good Stuff: A Reminiscence of My Father, Cary Grant, publicada esta primavera. El actor, siempre discreto, no dejó memorias propias.
Jennifer es fruto del cuarto matrimonio de Grant con la actriz Dyan Cannon. Cuando nació, Grant ya tenía 62 años. El actor, que participó en más de 70 películas, se retiró poco después para dedicarse a su "última producción". Con 77 años, se casó por quinta vez con la agente de relaciones públicas Barbara Harris, de 47 años menos. Grant trabajó junto a grandes directores, entre ellos Alfred Hitchcock, Frank Capra y Howard Hawks. Podía ser elegante, gracioso y atrevido. Tuvo éxito tanto con películas románticas, como con comedias, thrillers o cintas de aventuras. Su capacidad de transformación la aprendió siendo adolescente en Inglaterra. A los 13 años, el actor nacido como Alexander Archibald Leach se fue de su pobre casa paterna y se sumó como bailarín, cantante y malabarista a una compañía itinerante de variedades e interpretación. En 1921 viajó por primera vez a Estados Unidos para pequeñas actuaciones. Seis años después ya se le veía en comedias y musicales en Broadway. Tras la mudanza a Hollywood se puso el nombre artístico de Cary Grant. Ya en su cuarta cinta (La Venus rubia, de 1932) el apuesto actor recibió un papel protagonista junto a Marlene Dietrich. Un año después logró el éxito en Hollywood junto a Mae West en Lady Lue y No soy ningún ángel. Fue nominado dos veces al Oscar como mejor actor principal, por Serenata nostálgica (1941) y Un corazón en peligro (1944), pero en ambas ocasiones se fue con las manos vacías. En 1970 la Academia de Hollywood le dio un premio honorífico a su carrera. En su discurso de agradecimiento, Grant se disculpó con su típico estilo encantador ante sus compañeras femeninas por "aquello" que no supo. Además consideró un privilegio haber pertenecido a la "era más gloriosa" de Hollywood. Como dijo Frank Sinatra en la ceremonia al presentar el premio: "Nadie fue tan admirado y amado por sus colegas actores, por su habilidad, fineza, sutileza, encanto... y por ser Cary Grant".