bilbao. Acaba de publicar una nueva novela, El contenido del silencio, y se impone la gira promocional. Vestida de rojo y con la melena suelta se somete a preguntas y fotos. Sobre la polémica con Elvira Lindo a cuenta del premio Planeta prefiere pasar de largo.

Dicen que este libro es muy diferente al resto de sus novelas...

¿Tú tampoco te lo has leído?

No de arriba a abajo, con las promociones que hay ahora sólo da tiempo a verlo por encima.

No importa, yo te lo cuento. Si lo ves desde fuera sí parece diferente. Pero tiene toda la carga sentimental que le gusta a la gente que lee mis libros. Lo digo en el sentido de que exploran los sentimientos, no de que sean cursis. Es una mezcla de Stieg Larsson con Lucía Etxebarria...

Puede ser una mezcla explosiva...

Pero yo lo que quería hacer es un estilo Patricia Highsmith. Lo que importa en este tipo de novela negra es el estilo psicológico.

Patricia Highsmith resulta bastante cruel en sus novelas con el género humano.

Es cierto, tiene mucha menos fe en el género humano que yo.

¿Es verdad que el título lo han puesto los internautas?

Está elegido entre dos. El primer título del libro era La isla madre. No me acaba de gustar y propuse El contenido del silencio. Planeta dijo que quería La isla madre. Les propuse poner los dos títulos en Facebook y que eligiera la gente. Salió el que lleva y el que me gustaba a mí, El contenido del silencio.

¿Aceptó de buen grado la editorial el título sugerido en Facebook?

Aceptaron todo, incluso la foto de la contra con la que hubo también mucha bronca, no la querían.

Una suerte la suya, ¿no?

Yo vendo los libros de uno en uno y puedo decir si a usted no les gusta esto, me marcho. Nunca jamás me han podido imponer nada, pero tampoco quiero enormes peleas.

¿Peleona?

Sí. Pero en privado, no.

¿Cómo es en privado?

En mi casa soy una persona ultra dulce. Jamás he tenido una pelea con mi hija. Puedo negociar con ella hasta la saciedad, pero en lo profesional...

¿Es dura?

Dura no. Una mujer hace lo mismo que un hombre y es dura. Sin embargo, a él le consideraríamos asertivo. Yo soy igual que los hombres en lo profesional, asertiva.

En este libro se adentra en el mundo de las sectas, un tema que atrae mucho a los lectores.

Yo no lo tenía tan claro. Es un tema que me atraía a mí. Me quedé enganchada al cómo alguien entra en el mundo de las sectas. En el libro queda explicado perfectamente el proceso por el que entras. Todo el mundo ha experimentado esta sensación.

¿Todo el mundo?

Los partidos políticos ahora mismo funcionan como una secta. El fútbol está funcionando ahora mismo a nivel sectario: o eres del Barça o eres del Madrid, y si no, te quemo en una hoguera. Las relaciones sentimentales destructivas funcionan como una secta...

¿Está segura?

Sí. Hay una época de captación y el captador te hace una luna de miel increíble. Te dedica mucho tiempo y te dice lo maravillosa y estupenda que eres. Siguiente paso, te dice que estás destinada a algo muy alto. Tercer paso, mandarte a los retiros espirituales, aislarte. Eso hace también una pareja. El último paso es meterte en la casa y ya estás totalmente desconectada. Si tú lo miras en una relación es lo mismo: luna de miel, por qué llamas a este o a la otra, y luego dejas de trabajar. Estás aislada.

¿Dónde está la fascinación?

A la gente le fascina el tema porque es exageradamente lo que hemos podido vivir todos a nivel privado en algún momento de nuestra vida.

Hablemos, pero sólo si quiere, de Elvira Lindo y el tema del premio Planeta. Se armó un lío al afirmar usted que ella lo iba a ganar.

No entendí lo que pasó. No entendí su reacción. No quiero liarla más. Fue un malentendido. No quiero hablar de ello porque no sé cómo lo vas a manipular...