Vitoria. Krea colabora con la Filmoteca Vasca en la realización de La retrospectiva ferpecta, un recorrido dedicado a la filmografía del cineasta bilbaíno Álex de la Iglesia. Se trata del primer ciclo retrospectivo organizado por la Filmoteca Vasca en sus 33 años de historia, y se estrena en este campo reuniendo el curriculum cinematográfico completo de Álex de la Iglesia, un trayecto que dará comienzo en Vitoria-Gasteiz mañana, estando prevista la última proyección del ciclo -todas en el Aula Fundación Caja Vital de Dendaraba- para el próximo 18 de enero.

La primera proyección del ciclo presentará, a partir de las 20.00 horas, los cortometrajes Mamá (Pablo Berger, 1988) y Amor impasible (Iñaki Arteta, 1992), y el largometraje Todo por la pasta (Enrique Urbizu, 1991), donde Álex de la Iglesia trabajó como director artístico. La presentación de las primeras películas del programa correrá a cargo del propio cineasta bilbaíno, que estará acompañado por Joxean Fernández, director de la Filmoteca Vasca.

Además de en Gasteiz, el ciclo sobre Álex de la Iglesia se proyectará en Bilbao (Alhóndiga Bilbao), Donostia (Teatro Principal) y Baiona (Cinéma L'Atalante), y en la sala Araba de Dendaraba el precio de las entradas para las proyecciones será de 4 euros por sesión, pudiendo adquirirse un abono para todo el ciclo por 30 euros (3 y 25 euros, respectivamente, en el caso de contar con Tarjeta de Caja Vital).

Tras la cita de mañana, el programa seguirá -casi- cronológicamente la trayectoria de De la Iglesia, un director que combina su trabajo estatal con incursiones internacionales, y que todavía frota los ecos de su premio a la mejor dirección en el Festival de Venecia.

Acción mutante (jueves), El día de la bestia (lunes 7), Perdita Durango (lunes 21), Muertos de risa (miércoles 23), La comunidad (viernes 25), 800 balas (lunes 28), Crimen ferpecto (23 de diciembre), La habitación del niño+Mirindas asesinas (28 de diciembre), Los crímenes de Oxford (9 de enero), Lo mejor de Plutón BRBNero (12 de enero), y Balada triste de trompeta (18 de enero) dibujan el calendario del ciclo.

"La idea de una retrospectiva de mis películas me resulta en principio excitante, pero, por otro lado, inquietante", apunta el director. "Yo mismo me he sorprendido al respecto, al advertir que, por ejemplo, la traición, la presencia de la televisión, la búsqueda del padre, o la farsa trágica encerrada en un decorado, son asuntos que vuelven una y otra vez. El ridículo, los payasos, intentar entender la relación entre amor y humor, entre humor y horror son constantes".

La propia retrospectiva ha hecho reflexionar a De la Iglesia. Para llegar al mismo punto. "Esto no es ni bueno ni malo, es sencillamente así. Ya no puedo escapar de mí mismo. Estoy condenado a vivir conmigo hasta que muera. Intentaré llevar esta carga con dignidad. El infierno no son los otros, como yo creía. Lo peor está escondido en el rincón más oscuro de mi alma. El enemigo soy yo, ese yo al que no me atrevo a reconocer. Creo que de esto también he hablado en alguna peli. En estas películas está lo peor y lo mejor de mí mismo, y no lo niego".