Vitoria. Algunos son viejos conocidos aunque se escondan bajo nuevos nombres. Destaca, sobre años pasados, que hay más solistas, que hay más mujeres y que estilos como el rock y el hip hop, mayoritarios en otras ocasiones, o tienen menos peso o no están. Así se configura la parte final de la quinta edición del Concurso de Maquetas de Álava organizado por la Diputación, certamen que, como es habitual desde su nacimiento, dirimirá su fallo en directo. Cada uno de los ocho finalistas deberá demostrar a público y jurado las razones por las que es merecedor de los 6.000 euros del primer premio y los 1.000 al mejor combo en euskera.

La sala Jimmy Jazz será el escenario, en ambos casos a partir de las 20.00 horas, para que los días 13 y 20 de este mes, músicos y espectadores se reúnan en dos citas de entrada gratuitas con claro sabor indie con algunos toques de hard, heavy y rock. En la primera jornada, el protagonismo será para The Good Reasons, Plagarock, Eratu y Sacramento, conformando así la noche, tal vez, más guitarrera. La segunda contará con Paula Olaz, She'Sophi, Alain Alone & The Lonely Violin y Similar Interests.

Todos ellos buscarán tomar el relevo de Tom Tom Makuts, Kodigo Norte, The Walk Crimes y Los Fontane, los triunfadores en años anteriores del certamen impulsado por el área de Cultura de la Diputación.

Buen nivel A la espera de que cada uno de los contendientes en este 2011 presente sus credenciales en directo, los ocho elegidos lo han sido entre un total de 24 propuestas recibidas por parte del ente foral. En sus misterios y secretos se ha enfrascado un jurado que por el momento no tiene rostro, más que nada para evitar suspicacias.

De todas formas, los expertos han destacado, sobre lo recorrido hasta ahora, "la calidad de las maquetas presentadas, la alta participación femenina en esta edición, y la presencia de trabajos en solitario, en contraste con ediciones anteriores en las que predominaban los grupos". Del total de trabajos que se han postulado para este quinto certamen, ocho lo han hecho en inglés, 6 en castellano, 4 en euskera y dos que han unido dos o tres idiomas, a lo que hay que añadir que cuatro composiciones se han quedado fuera desde el principio por no cumplir con las bases.

De todas formas, ese camino es ya pasado. El futuro más inmediato lo marcan estas dos citas en directo, ocasiones para, más allá del galardón económico, darse a conocer, encontrar nuevos públicos, actuar en una sala profesional por la que de normal pasan grandes nombres estatales e internacionales y tener la posibilidad de contactar con otros músicos. Los espectadores no tienen voto como el jurado, pero sí voz y posibilidad de disfrutar.