Vitoria. Mañana actuará en Moscú y si todo hubiera ido como estaba planeado, su siguiente parada iba a ser Belén el próximo jueves 10. Pero Mikel Urdangarin ha tenido que cambiar de planes. La situación de alta tensión que se está viviendo en la zona a causa del comportamiento de Israel ha motivado que esta cita tenga que esperar.
Según comunicó ayer KAP, la agencia de representación del cantautor vasco, "debido a los últimos acontecimientos sucedidos" en Oriente Próximo, el recital, que Urdangarin tenía previsto ofrecer en la localidad de Cisjordania con la compañía del violinista Nika Bitchiashvili dentro de un festival retransmitido por televisión para Gaza y en el que también iban a participar otros intérpretes como Isamel Serrano, ha tenido que ser suspendido en el último momento.
Eso sí, la intención de los organizadores del evento es poder realizarlo en las mismas condiciones pero el próximo 23 de julio, si es que, claro está, se dan las condiciones para ello.
"Son unos conciertos bastante importantes para mí, que hay que aprovechar, y, sobre todo, disfrutar", declaraba hace unas semanas el propio Urdangarin a este periódico a la hora de referirse a los viajes a Moscú y Belén, una ilusión que mostraba de forma especial en el caso del viaje a Oriente Próximo. De momento, la cita sólo se atrasa. Es de esperar que no desaparezca.