Vitoria. En muchos lugares del Buenos Aires actual el tango se ha convertido, como pasa por ejemplo con el flamenco en tablaos de Madrid, en un simple reclamo para los turistas, un esbozo edulcorado hecho con más o menos calidad pero que no es ni sombra de lo que de verdad significa el género en toda su amplitud. Por lo general, aunque todavía quedan unas pocas tanguerías que son destacadas excepciones, se mezclan churras con merinas para satisfacer la curiosidad del viajero (ver por allí a alguien de casa en el papel del espectador es misión imposible).
De vez en cuando los sonidos llegados de Argentina suenan por Gasteiz. Tienen, además, una cita semanal en Hala Bedi gracias a La Tanguería. Pero el programa de la radio independiente no sólo se quiere quedar en las ondas, busca cristalizar su pasión también sobre un escenario. Como aliado para la ocasión se ha buscado a Gauekoak. Entre ambos han preparado para mañana una noche especial en Artium, una oportunidad para vivir el tango con mayúsculas, no ese pre-cocinado para ser consumido en una visita turística.
Cine y música en directo se darán la mano en una velada que arrancará a las 20.00 horas y cuya entrada será gratuita. La pantalla la ocupará el documental El café de los maestros. El concierto correrá a cargo de Tango Quattro. El resto lo pondrán los asistentes.
"Nuestra intención es que el público pueda ver a grandes del siglo XX y músicos del XXI", explicó ayer Carlos Spagnuolo, responsable de La Tanguería, quien estuvo acompañado en la presentación de esta doble cita por las miembros de Gauekoak Estíbaliz Rodríguez y Virginia Barredo.
Ayer y hoy Será la película producida por Gustavo Santoalalla y dirigida por Miguel Kohan la que se encargue de poner las primeras notas del día. Se trata de un filme que, por desgracia, no ha girado por estos lares en los circuitos comerciales pero que, por ejemplo, ha pasado por la Berlinale.
En principio, este proyecto nació con la intención de convertirse en un libro y dos CD. Pero durante el proceso se grabaron más de 200 horas de imágenes que dieron como resultado también el documental.
Se trata de una mirada a aquellos que protagonizaron la llamada Edad de Oro del Tango, es decir, los que pusieron música, letra y, en ocasiones, voz al género durante los años 40 y 50, intérpretes y compositores como Aníbal Arias, Oscar Berlingieri, Emilio de la Peña y Juan Carlos Godoy entre otros.
"Es un homenaje a todos los que marcaron una época, gente que hoy tiene ya más de 70 años pero que sigue en activo, actuando, cobrando vida cada vez que se sube a un escenario", apuntó Spagnuolo, quien también comentó que la película, que fue declarada en 2009 como "de interés cultural", por el Gobierno de Buenos Aires, recupera algunos temas vetados durante las épocas de dictadura que sufrió Argentina el siglo pasado.
Después, tras un breve descanso, llegará el turno para Tango Quattro, formación nacida hace 15 años en Madrid pero compuesta casi en su totalidad por músicos argentinos, un grupo que ha conseguido en este tiempo varios e importantes reconocimientos traducidos, sobre todo, en extensas giras tanto por Europa como por el continente americano.
La sonoridad y los propios arreglos son unas de las características principales de una agrupación que tampoco se ha cerrado nunca a las colaboraciones, por ejemplo, con Joaquín Sabina.
Ellos representan el hoy de un género que sigue vivo. La película será una oportunidad para disfrutar del ayer. Y esa mirada al pasado y el presente es lo que busca la jornada organizada por Hala Bedi y Gauekoak con la colaboración del museo de arte contemporáneo.
Organizadores, por cierto, que utilizarán la velada también para saber qué respuesta tiene el público alavés puesto que entre sus planes, si la cosa sale bien, está no ya repetir experiencia sino organizar otro tipo de citas relacionadas con el género. Como suele pasar siempre en estas cuestiones, seguro que ideas no faltan. Lo único necesario es que los espectadores quieran aceptar la invitación.